27 Ene, 2020 | Preocuparse por mantener su salud emocional no debería ser extraño para usted, sino todo lo contrario. Se debe tener el mayor de los cuidados con nuestras emociones, tal cual como lo hacemos con nuestro cuerpo. Por supuesto, los pasos para disfrutar de una vida emocionalmente saludable no son los mismos que para con nuestra salud física.

El camino hacia una salud emocional óptima está más relacionado con un trabajo interno, hecho por nosotros mismos, que incluye nuestra mente y espíritu. Aunque puede parecer difícil, no es nada del otro mundo. No implica grandes esfuerzos físicos, no es necesario un capital monetario, ni tampoco recurrir a remedios químicos. En primera instancia tan solo hace falta la disposición de la persona.

Ahora bien, aclaro que tener buena salud emocional no quiere decir andar por el mundo siempre con una vibra de paz y amor. Tampoco significa ser un individuo emocionalmente débil, para nada. Se trata más bien de aprender a controlar nuestras emociones, buenas o malas, procurando apostar por aquellas que nos beneficien más dependiendo de las circunstancias.

No significa que no vamos a tener momentos de estrés, depresión, molestia o angustia. También es sano sentir estas emociones. Significa que vamos a aprender a manejarnos en esos momentos de oscuridad para no cometer errores de los que posteriormente podamos arrepentirnos. Y que, además, tengamos la capacidad de parar de sentirnos de tal forma cuando comencemos a notar ciertos resultados negativos.

Salud emocional óptima en 3 pasos

Es posible recuperar, mejorar y mantener la salud emocional realizando cosas tan simples como: practicar algún deporte o hobbies, tener tiempo de ocio, platicar con amigos o viajar. Pero, aquí te propongo tres pasos, si los cumples, no tendrás que preocuparte tanto por tus emociones:

1.- Halla tu propósito y se agradecido

Lo mejor para una vida feliz es vivir haciendo lo que a uno le gusta. Soy partidaria de que nadie está en el mundo por simple casualidad, todos tenemos una misión y un propósito aquí. Encontrar el tuyo, y vivir de él, te ayudará a ser más positivo y a sentirte realizado.

Busca tiempo para hacer las cosas que te gustan y no olvides agradecer por todo lo bueno, pero en especial por todo lo malo.

2.- Aprende a aceptarte, entenderte y comunicarte

Uno de los mayores problemas de las emociones ocurre cuando involucra a otras personas. Expresar lo que sentimos y pensamos con éxito es más difícil de lo que parece, no obstante, tampoco es imposible. Para poder llevar una buena comunicación con los otros es importante hacer las paces con nosotros mismos.

Revísate, repara toda grieta que haya existido en el pasado, sana a tu niño interior herido, perdona a mamá y a papá y acéptate tal y como eres. Colócate a ti de primero en tu lista de prioridades, ámate y aprende a entenderte. Luego, veras como la relación y la convivencia con los otros será mucho más sencilla.

3.- Purifica tu entorno y vive el ahora

Aléjate de las personas que te quiten tu paz y tu equilibrio emocional. Aprende a decirles que no sin sentirte culpable. Recuerda que no le debes nada a nadie. Rodéate mejor de gente positiva, que te aprecien y te motiven.

Olvídate del pasado y permitas que otros te lo recuerden para hacerte sentir mal. No te preocupes por el futuro, lo que tenga que pasar, que pase. Deja todo en las manos de Dios y presta atención al presente. Vive, porque hoy estamos, mañana quizá no.