Porlamar
17 de mayo de 2024





EL TIEMPO EN MARGARITA 28°C






¡Ay Macuro… te empavó El Navegante! (Parte I)
Macuro, donde la escuela se queja en el resoplo de la playa cantora y en la ausencia poética de la brisa marinera, aquí, ráfaga amorosa que se trae la esperanza y al rato se regresa, a su quién sabe! Hacia un Osario de alcatraces, tal vez…
Perucho Aguirre

13 Oct, 2016 | Arribó a Macuro El Navegante. Arribó por aquí, hacen unos 500 años. Harto conocido el personaje, ayer del Macuro aborigen y ancestral. Sencillez y humildad, aun, donde sus niños cantan, la juventud evoca y sueña y, los viejos musitan. Es que aquí la edad es una añoranza y la vejez una forma expedita de demostrar que la realidad existe. Virtud que ayuda a Macuro a soportar, sin tener que pedirle nada a la queja. El calor santigua las mañanas, acrecenta su ebullición al mediodía y se marcha, bote a la mar en las tardes. Ya en las noches canta con la gente, como quien forma parte de las estrellas. El puerto es su propio medico y la medicina, ellos mismos; porque cuentan con el abrazo personal de la verde montaña costera, que sublima el beso azul e incondicional de la mar. Por donde arribó El Navegante de las impurezas. El anchuroso azul de las Antillas, por donde enfiló sus terribles rutas y proas amontonando centenarios que no han servido para mucho. A los políticos, los centenarios si les ha servido… Colón es el culpable que todo aquí cueste una fortuna. ¿Qué se llevo?... ¡Silencio absoluto! Macuro lo sabe, pero el secreto está muy bien guardado; donde se aparece la bullaranga inconfundible de sus ríos que salen de sus altos escondites e inaccesibles cuevas a hacerse sentir con vehemencia y gritar ¡Presente! con la maestra que aparecerá por algún azul, camino real o viento realengo… Macuro, donde la escuela se queja en el resoplo de la playa cantora y en la ausencia poética de la brisa marinera, aquí, ráfaga amorosa que se trae la esperanza y al rato se regresa, a su quién sabe! Hacia un Osario de alcatraces, tal vez… Estuve una vez y sigo enamorado de sus inocencias y no dejaré de ir, porque a cada instante en mis recuerdos arribo a ÉL. Macuro. Es la primera gallina criolla que pisó Colón, hacen más de 500 años! Entrañable mano abierta de labios encendidos, amor; imposibles de borrar de la razón. Imposible evitar que no se nos convierta en un latido más del corazón. El Puerto de Macuro tiene dos vías de acceso: La mar y nuestro corazón; porque a sus playas emprendedoras, como dice el Himno al Árbol "Debemos Solicito Amor".

¿Azul?




Contenido relacionado












Locales | Sucesos | Afición Deportiva | Nacionales | Internacionales | Vida de Hoy | Gente Feliz | 50° Aniversario | Opinión


Nosotros | HISTORIA | MISIÓN, VISIÓN Y VALORES