Los pescadores sacan las sardinas del tren para llevar el sustento a sus hogares, sobre todo los días difíciles de trabajo en el mar. / Foto: DANIEL RAMÍREZ

13 Ago, 2016 | Los pescadores de Punta Arenas, municipio Península de Macanao, se sienten desatendidos por las autoridades de Nueva Esparta. Así lo expresó un grupo de trabajadores del mar al equipo reporteril del SOL DE MARGARITA durante una visita a las rancherías.

Aunque para ellos, el trabajo de la pesca artesanal nunca ha sido una obligación, confesaron que hoy lo hacen más que todo porque es la forma más fácil que encuentran para conseguir los alimentos, por lo menos el pescado para llevar a casa. Y es que sienten el temor de ser asaltados y despojados de sus respectivos motores fuera de borda en alta mar, como le ha sucedido a más de uno de los marineros de la zona en reiteradas ocasiones.

Víctor Velásquez, pescador, comentó que a principios de este mes salieron a faenar a 17 millas náuticas de Punta Arenas y en plena luz del día los abordó un grupo de delincuentes, quienes se desplazaban en un peñero. Tras amenazrlos con armas de fuego, les quitaron los motores fuera de borda de su embarcación.

“No solo se llevaron mi motor sino también los de otros compañeros. En total, fueron cinco motores los que se llevaron”.

Alberto Romero, también pescador, manifestó que robos “van y vienen” y ellos quedan sin ser atendidos y recibir una respuesta por parte de las autoridades del estado.

Dijo que no hay vigilancia por parte de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana y que les gustaría que de verdad cumplieran con el servicio de vigilancia y patrullaje de zona para el resguardo de los pescadores y de algunos insumos que dejan en las rancherías.

Tren sardinero

Este jueves, los pescadores de Punta Arenas tendieron a muy poca distancia de la costa un tren sardinero. La sardina que capturan es la que utilizan para ir a la pesca de palangre artesanal.

Cuando se sienten “muy apretados” económicamente, sacan ciertas cantidades de sardina del tren para venderla a las cavas y poder conseguir un dinerito.

Compra de aceite

Semanalmente los pescadores reúnen las pimpinas de aceite vacías para luego contratar un transporte que las busque y las lleve hasta Boca de Pozo, donde compran el líquido para el motor. Genera un costo agregado para sus bolsillos, pero no tienen otra opción.

Generaciones

En esta comunidad pesquera de Península de Macanao, al igual que en otras, los hombres que se dedican a la tarea de pescar es porque desde muy niños aprendieron con sus padres el arte de navegar a mar adentro. Hoy cumplen la labor con sacrificio y esmero.