30 Abr, 2016 | Este mes de mayo quiero dedicárselo a todas las mujeres del mundo. Especialmente honrando a la Virgen María, mi persona y por supuesto mi mamá, que debido a su gracia de ser madre hoy estoy en este mundo.

Para mí las mujeres somos como una varillita mágica, Dios, el Universo nos ha planificado y creado de manera suprema, no para ser perfectas en la manera de hacer las cosas, pero sí magistrales en como llevamos nuestro día a día.

Porque cuando nos enfermamos nos podemos curar solas o acompañadas, buscamos la manera de salir adelante, las horas de trabajo para nosotras son infinitas, nunca paramos. Se nos creó de forma muy suave, sutil, pero con mucha fortaleza, podemos enfrentar todos los chaparrones que nos caigan encima y también ser capaz de lograr todo aquello que nos propongamos.

Somos creativas a la hora de resolver cualquier situación que se presente. Buscamos y negociamos con las mejores herramientas para solucionar nuestras adversidades, somos echadas pa'lante.

En nuestras vidas drenamos nuestras emociones a través de las lágrimas, porque con ellas expresamos dicha, dolor, alegría, desencanto, abandono, rabia, miedo y vanidad.

Con nuestra fuerza innata maravillamos al sexo opuesto, aunque muchos se asustan y salen corriendo. Somos luchadoras, cuando se nos mete algo en la cabeza vamos por eso, cuando estamos pasando por un mal momento le sonreímos a la vida, porque el hecho de ser mujer somos más empáticas en las adversidades de nuestros seres queridos, dándole una palabra de aliento, sentimos también su dolor y somos comprensivas por lo que están pasando.

También celebramos el éxito de otros con mucha euforia y le hacemos ver al mundo entero lo felices que estamos. También nos reímos a carcajadas cuando nos ponemos nerviosas y lloramos de alegría por una buena noticia.

Las mujeres expresamos más nuestras emociones y por eso nos entendemos mejor, tan solo una mirada o un abrazo calma los miedos de alguien.

A todas aquellas que tienen o pudieron tener la dicha de tener hijos, ámenlos, somos unas leonas con ellos, además, son el combustible que mantiene nuestro motor encendido, respetémoslos y aceptémoslos como son.

Mujeres, sin olvidar quiénes somos y de dónde venimos nunca perdamos el interés por cuidar nuestro aspecto físico, el cuidarse y mantener una buena imagen no es de una mujer vacía o superficial, todo lo contrario, recuerda que tu cuerpo es tu templo.

Lo logras aceptándote como eres, respetándote, cuidando de tu cuerpo, no sólo me refiero a lo físico sino la parte espiritual. La belleza sale a relucir por su propia naturaleza, ejemplo claro lo puedes ver en las flores de los bosques que a través de su propia fuerza interna solas florecen y se ven bellas.

Lo haces alimentando tu alma de cosas buenas, leyendo, meditando, caminando, haciendo ejercicio, una alimentación balanceada, haciéndote mascarillas tanto para tu cabello, como para tu cara. Así como la tierra se alimenta de sus propios elementos, aliméntate de todo aquello que creas que para ti es bueno. Las cosas no vienen solas hay que trabajarlas.

Feliz mes de mayo, brindo por todas las mujeres, no importa tu condición lo más importante es cómo te sientes. Para mí el sentirme bien es sentir mi paz interna. Lo importante es nutrir tu fuerza interna para agraciar al mundo con tu esencia. Nace de ti, hazlo por ti ¡Tú ya puedes lograrlo!

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