Sector privado no percibe ninguna mejora en los ámbitos económico y social del país. / Foto: ARCHIVO

23 May, 2018 | El sector privado del estado Nueva Esparta no augura buenas expectativas a futuro con la ratificación en la presidencia de la República de Nicolás Maduro, de acuerdo con los resultados que arrojó el proceso eleccionario del pasado domingo.

Andrés Rodríguez Ghersi, presidente de Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), considera que las elecciones efectuadas el pasado domingo son ilegítimas, en las que hubo irregularidades, y donde la mayoría no asistió a votar.

"El pueblo no está de acuerdo con la ratificación de ese mandatario, además esas elecciones no son reconocidas por los entes internacionales, quienes ya manifestaron su rechazo con algunas sanciones".

Refirió que no se perfila ninguna mejoría en la situación del país, si continúan las mismas políticas a nivel económico y social que no han sido beneficiosas para el pueblo.

Es evidente, agregó, que las empresas y las fuentes de trabajo disminuirán, a causa de políticas que estrangulan la economía.

"Estimamos que las condiciones serán más duras para el país en su totalidad, porque hasta que el gobierno no haga un cambio drástico en las políticas que han venido aplicando, no saldrá de esta crisis económica y social", acotó Rodríguez.

Por su parte, el presidente de Conseturismo, Jesús Irausquín, mencionó que el sector empresarial cuestionó la validez de este llamado a votar, pues se partió de unas elecciones írritas y en las que las expectativas para el futuro del país van a ser las mismas o más complicadas de lo que están ahora.

"Con un modelo económico que quieren seguir forjando y que en 20 años no ha dado resultados", acotó Irausquín.

Consideró que la abstención que hubo el 20 de mayo es un llamado de atención al gobierno, que debe evaluar cómo ha estado dirigiendo el destino del país y que ese diálogo solo se puede componer si generan confianza en un pueblo, el cual dejó demostrado que está decepcionado.

Diálogo

El gobierno nuevamente citó a la oposición a dialogar, pero a juicio de Irausquín, ese diálogo "es sordo y se queda en un monólogo, porque para que exista, tiene que haber un cambio de actitud, dando señales claras, que partan de una enmienda por parte del gobierno, con la libertad de los presos políticos y un cambio en el modelo económico", enunció.