21 Oct, 2016 | Una situación que veo con un tanto de preocupación es el hecho, de aquellas personas que se vuelven con el tiempo acumuladores de perros. Sé, que es difícil para muchos el ver a un perro de la calle en mal estado y no darle una mano cuando estamos frente aél, pero el problema no se presenta cuando rescatas, ya que es una acción de las más amorosas que mis ojos han visto, el problema está cuando rescatas tantos y tantos perros que luego no sabes que hacer, ya que cuando tienes esa situación, se te pueden enfermar o peor aún se puede desatar una epidemia en el recinto donde están.

El rescatar a un perro no solo es el hecho de hacer el rescate, es también estar pendiente de su cuidado y manutención.

Por ejemplo, cuando tomas la decisión de sacarlo de la calle, es para darle una vida mejor, libre no solo del hambre, sino, también de las enfermedades y bacterias que la calle produce.

Toco este tema con la finalidad de abrir un poco los sentidos a las personas que deseen rescatar perros con responsabilidad y no volverse malos acumuladores. Digo malos acumuladores, ya que me ha tocado ver como existen perros en lugares fuera de las calles, pero adentro están faltos de vitaminas y sus respectivas vacunas, es decir, el problema de la calle metido en un lugar cerrado. Debemos ser conscientes de lograr ese paso, se debe idear una planificación la cual nos lleve a darles una vida mejor a nuestros perritos de calle, donde tengan comida, pero también tengan las atenciones y medicamentos para que realmente estén cuidados con responsabilidad. No es solo tener para la comida sino, para sus vacunas anuales y demás. Todo esto se logra con una buena organización, las cuales también las he visto y de verdad que se merecen una buena estrella.

Llegar a un sitio y ver como los perros también sufren de hambre, es doloroso, ver cómo les faltan sus vacunas y vitaminas también. Sé que el esfuerzo es duro en nuestra Venezuela, pero si otros pueden hacerlo, los demás también.

También se debe tomar en cuenta el tiempo y dedicación que deben tener las personas para dar este paso. Rescatar en tiempos de vacaciones por ejemplo, es algo fácil, ya que poseemos un tiempo casi completo, pero el problema se presenta cuando empieza la temporada de trabajo, ya que, no sabemos qué hacer con ellos, porque el tiempo de trabajo nos va a empezar a consumir y nuestros bellos rescatados empiezan a notar nuestra ausencia, lo cual van creando otros problemas de tipo conductual en la manada.

Invito a todas esas personas que quieren rescatar perros en las calles a que se organicen y planifiquen de una manera en la cual nuestros peludos amigos tengan una vida mejor que en las calles y que al momento de dar en adopción, las personas vean que están entregando una vida realmente transformada.

Recuerden siempre que, ser líder asertivo, es pensar en el beneficio de tu manada, eso siempre al final, te traerá beneficio y bendición para tu vida.