El pescador traslada hasta la ranchería las lisas para su acopio y venta luego de la faena en el mar. / Foto: JOSÉ RODRÍGUEZ

8 Oct, 2016 | Desde hace un par de meses, el cardumen de lisas llegó para quedarse hasta enero en las cristalinas aguas de La Isleta. Esta especie marina es preferida por muchos pescadores debido a la facilidad que tienen para atraparlo. Algunos afirman que, en el caso de los que se inician en esta labor, es perfecta para ganar experiencia.

De acuerdo con Neomar Gómez, trabajador del mar, se debe adentrar en la playa a eso de las siete de la mañana para observar con claridad suficiente cuando la lisa “borbollea”. En ese momento, se lanzan unas redes de 400 metros de largo para capturarla.

“Hasta 100 kilogramos en menos de una hora puedo pescar en un día bueno”, comentó Gómez. Asimismo, resaltó que el cardumen se encuentra en zonas llanas, a unos seis metros de profundidad.

Una vez atrapadas en la red, comienzan a saltar hasta que son llevadas a tierra firme y son dispuestas para la venta.

Gustos

Referente a la comercialización de este pescado, el marinero Germán Gómez explicó que las huevas de las lisas son un manjar exquisito para muchos margariteños; pero infortunadamente, no hay manera de que los pescadores puedan determinar cuáles vienen con ellas. “Tendríamos que abrirlas para saberlo”, indicó Gómez. A este procedimiento lo denominan “escalar”.

En ese sentido, les resulta imposible aprovechar las que vengan con huevas para ofertarlas a un precio mayor y obtener mejores ganancias.

Enfatizó que un kilogramo de esta delicia puede venderse hasta en cinco mil bolívares y que mucha gente prefieren comerlas fritas.

Otros

Trabajadores de la pesquería añadieron que las otras especies marinas que se encuentran en aguas cercanas.

Ranchería

Los neoespartanos interesados en comprar lisas, pueden dirigirse hasta la ranchería de Neomar Gómez, justo a la orilla de la playa, quien al llega de la faena a las diez de la mañana, vende el pescado en 400 bolívares el kilogramo.