26 May, 2016 | La crisis económica nos asfixia. Las empresas reducen su ritmo de actividad y los puestos de trabajo. Aunque el sector público mantiene su adiposa burocracia, ya no puede crecer más y las remuneraciones que ofrece se parecen más a una “ayudita”, que a un salario digno.

Desempleo e inflación empujan a un número creciente de venezolanos por debajo de la línea de pobreza. Algunos, relativamente pocos, pero con gran capacidad para hacer daño, caen en la delincuencia. Otros adoptan una actitud mendicante para recibir las exiguas, aleatorias e infamantes (censos, listas, colas, chantajes, promesas y engaños) prestaciones de las misiones del gobierno.

Por fortuna para nuestra sociedad la mayoría de los venezolanos trabaja y lucha. Teniendo en contra el más hostil de los entornos, asumen riesgos y emprenden. Con su propio esfuerzo y gran dignidad, crean riqueza, satisfacen las necesidades de sus hogares y despejan el camino para que otros también crezcan.

Frente a esta realidad, en Nueva Esparta algunas alcaldías han comenzado a entender que su función trascendental es la de convertirse en agentes promotores del desarrollo. Ahora saben que fomentar la articulación de alianzas productivas entre los emprendedores, los sectores empresariales consolidados y las instituciones del sector público, es la clave para lograr la transformación de la Venezuela rentista y subsidiada, en una Venezuela productiva y emprendedora.

El viernes de la semana próxima, el capítulo Nueva Esparta de la Asociación de Alcaldes por Venezuela ofrecerá la oportunidad de discutir sobre este tema en el Foro "Emprendimiento y Desarrollo Económico Local" que tendrá lugar en el Hotel Tibisay.