Aseguran que roban un taxi por día. / Foto: ARCHIVO

7 May, 2016 | Los transportistas de la entidad siguen siendo víctimas de la delincuencia, lo que a su modo de ver se traduce en fallas evidentes de los dispositivos de seguridad que han venido instalando incluso en algunas unidades, sin lograr reducir los índices delictivos que atentan contra esos prestadores de servicio.

José Luis Isase, presidente del Sindicato Único de Trabajadores del Transporte de Nueva Esparta (Suttene), reiteró que el dispositivo VEN-911 lo anunciaron como la panacea tecnológica para enfrentar las bandas que azotan a los transportistas y no ven los resultados.

Citó que hace aproximadamente año y medio instalaron equipos de video-vigilancia a por lo menos 60 unidades del transporte colectivo, pero ninguno funciona, lo cual confirmó al asegurar que los tres robos de unidades más recientes fueron casualmente a buses que tenían ese sistema y pese a haber pulsado los botones de pánico, en ninguno de los casos se obtuvo respuesta.

Expuso que la coordinación del VEN-911 está en manos del Ministerio de Interior, Justicia y Paz, pero son funcionarios castrenses los que salen a “lavarle la cara” ante las constantes fallas.

Un taxi por día

El presidente del Suttene enfatizó la alarmante situación que está viviendo el sector de los taxistas, especialmente aquellos que prestan servicios o son propietarios de Nissan B-13, B-14 o B-15, que son los predilectos de las bandas delictivas.

Aseveró que en promedio roban uno de esos vehículos por día y lo peor es, que ya no solamente se lo llevan estando estacionado sino que muchos de los conductores han sido perseguidos hasta sus casas donde son despojados de su vehículos y otros objetos de valor.

Contundencia

El presidente del Suttene llamó a los responsables de garantizar la seguridad ciudadana, a tomar acciones contundentes para evitar que el hampa siga cobrando vidas de los transportistas que se sienten desprotegidos por las intermitentes medidas que aplica el gobierno sólo cuando manifiestan y hacen sentir sus voces de protesta.