Kylian Mbappé y Luka Modric estarán cara a cara el domingo en la final del Mundial. / Foto: CORTESÍA DIEZ

15 Jul, 2018 | La final entre Francia y Croacia arroja varias curiosidades antes del pitazo inicial.

Desde 1998 no se vivía una final entre un cuadro campeón y uno que busca levantar por primera vez el trofeo de la competición. Aquella vez, era Francia la que llegaba como aspirante al primer título contra Brasil que ya contaba con cuatro títulos mundiales. Además, el cuadro francés accedió a su primera final en una copa del mundo en aquel año.

En Francia 1998, las mismas selecciones que disputarán la final de 2018, también fueron protagonistas. Los galos eliminaron a los croatas en semifinales y levantaron el título contra Brasil en la final. Por su parte, los ajedrezados se quedaron con la medalla de bronce tras derrotar a Países Bajos en el partido para definir el tercer y cuarto puesto, señala un trabajo de france24.com/es.

Los dirigidos por Didier Deschamps llegan con la ventaja de no haber disputado un alargue en la fase final del torneo y que solo una vez estuvieron por debajo del marcador. Los croatas por su parte disputarán la final luego de haber jugado, en minutos, cuatro partidos (si se suman los tres tiempos extra que jugó en la fase final contra Dinamarca, Rusia e Inglaterra).

A su vez, los dirigidos por Zlatko Dalic llegan con una mentalidad fuerte y al parecer inquebrantable, ya que fueron capaces de revertir dos partidos en los que comenzaron perdiendo. Contra los anfitriones en cuartos de final y contra los ingleses en semifinales.

Para destacar, el técnico francés, Didier Deschamps, podría entrar en la historia ya que sería el tercer entrenador que consigue un mundial como jugador y como técnico al lado de leyendas como Mario Zagallo y Franz Beckenbauer.

Francia-Croacia: ¿qué dicen las estadísticas?

En el recuento histórico de enfrentamientos entre ambos seleccionados, el saldo pone como favorito a Francia, ya que jamás ha caído con el equipo croata en los cinco partidos que han disputado.

Dentro de los cinco enfrentamientos, solo dos han ocurrido en campeonatos oficiales. En semifinales del Mundial de 1998, cuando los galos se impusieron por 2 a 1 en semifinales, y en la fase de grupos de la Euro 2004 que dejó un empate 2-2.

Los tres partidos restantes fueron amistosos, en 1999, 2000 y 2011. Los ajedrezados recibieron cinco goles en contra y nunca pudieron marcarles a los franceses.

Las fortalezas de cada equipo

Para la final, ambos países cuentan con sus cartas para obtener un resultado favorable. Los galos tienen a Antoine Griezmann y Kylian Mbappé que suman entre los dos seis goles, además de contar con un mediocampo sólido con N’golo Kanté, Blaise Matuidi y Paul Pogba, esenciales para la recuperación y el armado del juego.

Por su parte, los croatas tienen a Luka Modric e Ivan Rakitic, dos de los mejores volantes del mundo de la actualidad, fundamentales en los tiempos extra que ha jugado su selección. De hecho, en semifinales, Rakitic recorrió 14 kilómetros en los 120 minutos de partido. En la zona de ataque cuentan con Ivan Perisic, Mario Mandzukic (autores de los goles en la semifinal ante Inglaterra) y Ante Rebic, que es una de las revelaciones del torneo por su rendimiento y despliegue físico.

El partido llena de expectativas a todo el público ya que ambas escuadras han demostrado ser versátiles cuando de generar juego ofensivo se trata y ser fuertes en conjunto a la hora de enfrentar los partidos que han tenido.

Los aficionados que estarán presentes en el estadio de Luzhnikí de Moscú podrán ser testigos del segundo campeonato del mundo de Francia luego de 20 años o de la primera vez que Croacia levante la Copa Mundial de la FIFA.