El VIH ocasiona el sida y, además, interfiere con la capacidad del cuerpo de combatir infecciones. / Foto: CORTESÍA

27 May, 2018 | La educación como parte de la prevención de enfermedades no tiene edad. Con esa premisa en mente, el día 23 de mayo se establece en Venezuela el Día de la Prevención Escolar del VIH/Sida.

Se ha establecido que, desde el punto de vista biológico, la adolescente no está preparada para una relación sexual, debido a que aún no produce sustancias bactericidas y víricas que produce una mujer adulta, lo cual le hace susceptible a enfermedades de transmisión sexual.

La sexualidad temprana se acompaña de problemas psicológicos. La brevedad de las relaciones ocasionales o esporádicas suele generar sufrimiento psicológico, desconfianza y pérdida de la autoestima, ante sentimientos de haber sacrificado valores personales por algo pasajero o poco auténtico.

Existen tres conceptos básicos:

- Madurez sexual: edad en la cual se obtiene la capacidad para reproducirse.

- Educación sexual: proceso de enseñanza-aprendizaje en el que se forma al hombre en lo relacionado con el proceso y los efectos de la actividad sexual.

- Inteligencia sexual: capacidad de entender o comprender nuestro cuerpo, tanto en lo físico como en lo emocional.

La inteligencia sexual no es un talento innato sino una habilidad aprendida, es diferente en cada persona y se basa en la responsabilidad que se tiene consigo mismo y con el otro.

Aprender a tener inteligencia sexual desde la adolescencia dará a nuestras sociedades ciudadanos más responsables, con una disminución de la frecuencia de embarazo precoz y enfermedades de transmisión sexual.

Nos leemos en ocho días. Que la Virgen les mantenga bajo su manto protector.