Expertos apuntan a que se requiere ayuda humanitaria. / Foto: CORTESÍA

29 Ene, 2018 | Las difíciles circunstancias que viene atravesando Venezuela ameritan ser analizadas desde los distintos escenarios que pueden darse, pues cuando en un país la política, la economía y los aspectos sociales coinciden en sus crisis, las variables son diversas y la visión debe ser amplia.

Así se concluye de la conferencia “Perspectivas 2018, análisis de entorno en lo político, económico, salud y nutrición”, organizado por el grupo de trabajo StateAlumni Venezuela, sobre el cual su coordinador Jhonatan Rodríguez, dijo que la iniciativa surgió de la mano con la embajada Americana, vista la necesidad de comprender teóricamente los hechos que ocurren en el país. “Pensamos que era necesario iniciando el año, participar de un análisis exhaustivo, que expertos en diversas áreas fundamentales para la vida nos pusieran en contexto”.

Rodríguez destaca que la actualización informativa es muy importante en momentos tan vulnerables como los que experimenta Venezuela. ”Saber qué terrenos pisamos, y los caminos que tenemos para seguir andando, genera seguridad, no necesariamente porque el futuro sea promisor, sino porque podemos estar más claros en los pasos que daremos”.

Para cumplir el objetivo, dijo que primero fueron seleccionados como ponentes de los temas 4 profesionales, catedráticos, de primer nivel, y segundo consideraron la asistencia de una sociedad civil margariteña influenciadora de las acciones que procuran bienestar para la región, por lo que gratamente se contó con la presencia de autoridades del gobierno regional, de gobiernos municipales, ejecutivos, ong, gremios y medios de comunicación que agradecieron a StateAlumni el encuentro con tan destacadas figuras. “Hacía tiempo que en Margarita no se daba una reunión de tan alto nivel de análisis”, coincidieron algunos presentes.

Susana Rafalli: No hay duda que requerimos ayuda humanitaria

Susana Rafalli, presidenta de Caritas Venezuela, analizó en la Conferencia el tema de la alimentación, precisamente por la ardua labor que está llevando esta organización, en la que insistentemente han alertado sobre los problemas de nutrición que ahora y a futuro enfrentarán los venezolanos.

Ratificó que es fundamental que se realicen debates sobre este tema porque tenemos todas las características que determinan una emergencia humanitaria compleja, por su escala, porque es masiva y por la cantidad de gente afectada.

Rafalli aseguró que la intensidad del daño es altísima, al punto que cobra vidas, lo que significa una violación masiva de los derechos humanos, y la demostración del Estado de su incapacidad para atender la situación. “Es una emergencia que no puede contener, afectando incluso a los países fronterizos”.

Advierte que todo ha sido muy cruel, porque es una emergencia lenta, que actúa por desgaste, y el tiempo transcurrido es tan largo que empieza la gente a normalizar lo negativo. Las colas, los niños desnutridos, las enfermedades, se asumen como cosas del destino.

Siendo así su planteamiento es que, cuando se dé el momento la reconstrucción deberá ser desde cero, y habrá que aplicar procesos sofisticados de recuperación.

Jo D'Elía: De crisis profunda a emergencia humanitaria

El tema referido a la situación del derecho a la salud en Venezuela, fue abordado por la activista en Derechos Humanos Jo D´Elia, del equipo de investigación de Provea y Codevida.

Calificó de peligrosa la privación masiva del derecho a la salud de los venezolanos, agravada por la escasez masiva de alimentos. A su juicio Venezuela no podrá salir de esta situación sin ayuda externa, por eso afirma que es importantísimo mostrar lo que ocurre.

D´Elía explicó que la actualidad es consecuencia de un vacío legal enorme, porque eso conlleva a que las autoridades tomen decisiones arbitrarias, por eso afirma este es uno de los principales retos y desafíos.

“Tenemos un sistema de salud desestructurado, una infraestructura destruida en su mayoría, el 70 por ciento de personal especializado se ha retirado del sistema sanitario público, el Estado lo que ha hecho es privatizar la salud aunque diga lo contrario, porque quien no tenga medios propios no se salva en un hospital”.

Con todo esto D´Élía concluye que, de una crisis profunda hemos pasado a una emergencia humanitaria de características complejas, pues tales hechos solo ocurren en países en guerra o luego de desastres naturales, y ese no es nuestro caso.

Sin embargo, sigue explicando, internacionalmente la situación se percibe como compleja porque los hechos son producto del quiebre del Estado, hay procesos políticos autoritarios, el Estado no funciona, hay ausencia de instituciones garantes, y violencia del Estado contra la población.

Las perspectivas es que este 2018 nos mantendremos en emergencia, de allí que vienen mayores desafíos para el trabajo humanitario. Habrá más personas vulnerables para atender, será necesario facilitar más herramientas y recursos terapéuticos que ayuden a resistir, pero también recomienda Jo D´Elía, continuar haciendo incidencia pública, seguir motivando, divulgando, articulando, para que cesen las causas de esta emergencia.

José Manuel Puente: Necesitaremos un liderazgo dinámico y positivo

Considerando que uno de los escenarios para Venezuela es su recuperación, José Manuel Puente, profesor y asesor del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA), aseguró que necesitaremos un nuevo liderazgo dinámico y positivo que aplique un programa de reformas integrales, ya que su piso será 18 años de errores y desaciertos.

Recursos financieros para fortalecer el sector externo de la economía, focalización hacia la reducción de la inflación mensual para llevarla a un dígito y la construcción de bases para la recuperación del crecimiento, es parte de los pasos de la receta.

Afirmó que para revertir el ciclo de recesión se requiere indiscutiblemente de ayuda internacional, plantearse políticas de ajuste fiscal que permitan reducir los gastos y aumentar los ingresos, al igual que medidas específicas para eliminar los controles de precios y sincerar el costo de los productos a su costo de producción; establecer subsidios sostenibles para quienes más lo necesitan; crear un fondo de estabilización económica y desmontar el control de cambio con un solo tipo de cambio competitivo.

Advirtió a los empresarios que “la única manera de crecer es producir éticamente”, y su recomendación es que reduzcan los lapsos de cuentas por cobrar y llegar a acuerdos negociados para reducir los lapsos de pago; defender el capital humano de sus empresas “con los dientes”, buscando opciones de compensación salarial con bonos especiales, pero asegurarse también de diseñar un “salario emocional” para que los empleados se sientan parte de la solución para mejorar.

Puente es optimista en cuanto a lo que puede ocurrir en Venezuela, pues parte del hecho que, si Venezuela tuvo una de las economías más exitosas de mundo entre el periodo de los años 50 al 79, el éxito puede volver a ocurrir, de hecho refirió que de acuerdo con la información de la Opep, Venezuela cuenta con las mayores reservas petroleras del mundo por lo que tiene una oportunidad y capacidad extraordinaria para reinventarse y alcanzar el éxito.

“Tenemos mucho por hacer y Venezuela tiene potencial en todos los ámbitos para lograrlo”, sostuvo, invitando a todos a resistir, tratar de sobrevivir y aguantar para estar aquí cuando vengan los buenos negocios.

Jhon Magdaleno: Los procesos electorales son un elemento importante para la transición

Cerrando la conferencia “Perspectivas 2018” el politólogo John Magdaleno, no dio paso a la disyuntiva de si participar o no en las elecciones presidenciales de abril próximo, pues aun creyendo que hay altas probabilidades de fraude, el estudio de 60 casos sobre transición a la democracia le aseguran que los procesos electorales son un elemento importante para el cambio.

“La elecciones son una estrategia posible,pero hay que tener conciencia de que probablemente habrá algún tipo fraude, y por eso se necesita tener claridad en la estrategia para utilizarla como vía para precipitar una crisis política mayor y sumarla a los otros elementos que son esenciales para fracturar la coalición dominante, y dar inicio a la transición. Hay que saber lo que se quiere exactamente y entender que para lograrlo habrá que hacer cosas que quizás no gusten”, enfatizó.

Magdaleno afirma que el estudio de transiciones democráticas le ha llevado a definir el régimen político actual de Venezuela como un “autoritarismo hegemónico con crecientes rasgos totalitarios”, pero además a partir de esa literatura y teoría construida en base a experiencias y hechos históricos reales, puede asegurar que de las dictaduras si se puede salir con votos, justamente porque forma parte de la transición.

Concibe la lucha para recobrar la democracia como un juego de ajedrez simultaneo, donde el gran maestro juega hasta 30 tableros, y gana, “solo se necesita foco y estrategia”.

En tal sentido, plantea a la oposición jugar al menos sobre 12 posiciones, siendo la primera, estimular a la opinión pública nacional e internacional, no deprimirla o atacarla sino alentarla; activar los sectores sociales con marchas, pero más auncon articulación de sus intereses e integración; seguir procurando la actuación de los organismos multilaterales, así como la de los presidentes y organismos internacionales; conversar con los empresarios, pero no solo los que hablan de cambio sino tender puentes con los que están cerca de régimen, porque sin duda allí también encontrarán algunos dispuestos a apoyar la transformación; buscar la interlocución con el “chavismo moderado”; realzar los valores espirituales a través de la iglesia, y procurar un comportamiento neutralizado de las fuerzas armadas como garantía frente a situaciones límites.

La posición del politólogo es de apoyo al diálogo, a las negociaciones con el Gobierno y con otros factores de la coalición dominante, porque si el objetivo es la transición, hay que jugarle a todas las fichas. “Tienes que preguntarte si quieres o no salir del régimen autoritario”, insistió.“Es un tema de inteligencia estratégica colectiva, es crear una estrategia dominante, la más viable y que más daño haga al régimen para generar la fractura necesaria”.

Reitera que uno de los tableros debe ser las elecciones, “hay que dar la pelea, pero documentarla, reclamar, hacer campaña. El conflicto necesita una base de legitimación social, y con cada uno de esos pasos se van sumando acusaciones”.

Como consejos finales a la audiencia, dijo, “hay que mantener la calma frente al terror, aprender de las experiencias de otros países, y prestar atención a las palabras peligrosas”.