Rafael Lugo, mecánico de Puerto Moreno, asegura que arreglar un motor puede costar hasta seis millones de bolívares. / Foto: SOPHIA HERNÁNDEZ @sophiahernandezg

6 Oct, 2017 | El alto costo de los implementos para la pesca artesanal ha afectado sobremanera la continuidad de la labor de los hombres que se hacen a la mar en busca del sustento diario.

Desde artículos básicos hasta los motores fuera de borda se han convertido en insumos difíciles de costear e incluso de conseguir.

Un rollo de cien metros de nailon, que a principio de año costaba nueve mil bolívares, en la actualidad alcanza los 20 mil y, dependiendo del grosor del mismo, puede llegar a costar hasta 60 mil bolívares.

En el caso de los anzuelos, cada uno se cotiza entre 500 a mil bolívares, es decir, para obtener una caja con cien de estos hay que pagar Bs 100 mil.

El tamaño y la marca de los materiales influye en el precio de los mismos; sin embargo, en ocasiones el costo no es el único impedimento, la escasez se hace presente cuando las ferreterías del ramo no pueden reponer su inventario por falta de divisas.

Xiomara Valdiviezo, encargada de una tienda de artículos de pesca, explicó que no todo el tiempo pueden reponer la mercancía y, por lo tanto, no pueden responder oportunamente la demanda.

En el caso de los motores fuera de borda dos tiempos de 75 caballos de fuerza, los precios oscilan entre 30 a 50 millones de bolívares.

Sin embargo, algunos vendedores independientes aseguran que pueden conseguirse usados y con vida útil a un precio más bajo.

Testimonio

Pescadores de Puerto Moreno aseguran que adquirir un motor nuevo es imposible.

Luis Alberto González, trabajador del mar del referido sector, explicó que cuando se avería su motor la única solución es mandarlo a reparar a pesar del alto costo de las piezas y repuestos.

Agegó que muchos de sus compañeros no han puesto a andar sus peñeros porque no han podido pagar la reparación.

Rafael Lugo, mecánico del sector, aseguró que arreglar el sistema eléctrico de un motor puede alcanzar los seis millones de bolívares. “Un par de bujías cuesta Bs 90 mil”.

Sin embargo destacó que en distintos puntos de la isla de Margarita, para los marinos están disponibles tiendas donde surten de manera regulada insumos para pesca a precios solidarios.

Añadió que para solventar la problemática de los motores, algunos trabajadores del mar han recibido ayuda del gobierno regional.

Hombres dedicados a la pesca de altura, quienes comercializan su producto fuera del territorio insular, tienen más acceso a la moneda extranjera, a diferencia del pescador artesanal, quien se ve afectado debido a que vende la proteína, en bolívares y no puede reponer los motores, ya que estos son vendidos en dólares en comercios de la entidad.