Proceso de trasplantado. En tres meses, los pequeños brotes producirán 80 toneladas de cebolla. /
Foto: GLADIFER ALBORNOZ | @gladiferalbornoz

4 Jul, 2017 | En la parcela Virgen del Valle, situada en Hato Orinoco, municipio Tubores, un grupo de quiboreños sigue cultivando la cebolla con la finalidad de abaratar los costos para los neoespartanos.

Así lo indicó Rafael Simón Vivas, socio de Jorge Luis Pérez, ambos del estado Lara, quienes aseguraron que las tierras margariteñas son maravillosas para el trabajo agrícola.

Desde hace más de dos años, Vivas y Pérez se dedican al cultivo de cebolla en la localidad, donde además de trabajar la tierra, orientan al resto de los parceleros del sector.

En esta época del año trasplantan las matas de cebolla, las cuales en tres meses, dependiendo del estado del tiempo, el uso pertinente de fertilizantes y demás factores, producirán 80 toneladas.

Dotados de un buen equipo, sistema de riego, tanques, tractores, productos agrícolas y talento humano, el cual es traído especialmente de la población de Quíbor, estado Lar,a se encargan de que la producción se haga de manera profesional para garantizar una excelente cosecha que puedan comercializar tanto en la comunidad como en mercados más grandes a precios asequibles.

Vivas comentó que los trabajadores de la tierra deben ofrecer productos económicos para que la gente pueda comer.

“Somos productores, no podemos vender igual o más caro que los comerciantes del mercado”, acotó.

Inconvenientes

A pesar de ser apoyados por instancias gubernamentales, Pérez indicó que las semillas de cebolla les resultan sumamente caras pues las mismas son importadas.

Detalló que por cada lata nacen unas 100 pequeñas matas y cada envase tiene un costo de 300 mil bolívares, el cual es difícil costear, sobre todo para los pequeños productores.

Resaltó la necesidad de que los organismos pertinentes apoyen a los agricultores locales en la adquisición de las semillas, ya que según explicó, si el precio sigue subiendo, se tendrá que paralizar el cultivo.

Pérez informó que las mangueras de riego que utilizan las traen desde el estado Lara, así como que a algunos de los 70 parceleros de Hato Orinoco se les dificulta adquirirlas.
Mencionó también que con el mencionado sistema, ahorran el 80% del agua que utilizan durante la jornada diaria.

Lluvias

Con respecto al estado del tiempo, aseveró que las lluvias de las últimas semanas no afectaron la siembra en su parcela.

Explicó que las hectáreas que utilizan son aquellas donde no se empoza el agua, para efectos de conservar en buen estado los brotes de cebolla.

“La cebolla es un producto de verano, pero muchos creen que es de invierno. La misma se cultiva en un clima templado; sin embargo, poca lluvia también nos favorece. Un invierno de 10 a 15 días arruinaría todo el trabajo”, añadió.

Pasatiempo

Rafael Simón Vivas, copropietario de la parcela Virgen del Valle, comentó que una vez se coseche la siembra de cebolla, se dedicarán al pequeño espacio donde tienen plantados distintos árboles frutales: patilla, parchita, lechosa, níspero, aguacate, limón, entre otros.