El presidente de Fedecámaras Nueva Esparta alertó la caída de las ventas de alimentos importados. / Foto: DEXCY GUÉDEZ

30 Jun, 2017 | Los vaivenes en los precios del dólar en los últimos días han disparado considerablemente los costos de los productos importados, especialmente alimentos, lo que ha ocasionado una caída importante en las ventas de los comercios de la entidad.

El presidente de Fedecámaras Nueva Esparta, Andrés Rodríguez Ghersi, expresó preocupación debido a que con las alteraciones del orden público y la crispación política que se vive en el resto del país, se han reducido en gran manera los despachos de alimentos e insumos de producción nacional hacia esta zona insular.

Expuso que los neoespartanos que en cierta forma venían supliendo la escasez de los productos de la dieta diaria por los importados, en estos momentos les resulta casi imposible pues con la implementación del sistema de Divisas Complementarias (Dicom), el valor de la moneda norteamericana se triplicó y se refleja directamente en los costos de los alimentos.

Detalló que el dólar pasó de alrededor de 700 a 2.640 bolívares, que ha sido lo fijado en las más recientes subastas del Banco Central de Venezuela (BCV).

Insistió además que los montos de esas pujas, que apenas han superado los 25 millones por jornada, resultan ínfimos para todas las empresas del país e incluso fue más allá al comparar que esas cantidades no alcanzan siquiera para cubrir las importaciones que requiere el Puerto Libre de Margarita.

Empresas insostenibles

Rodríguez Ghersi se hizo eco sobre el resultado de una encuesta aplicada entre las industrias afiliadas a la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), al cierre del primer trimestre de este año, la cual da cuenta que 32% de las empresas indica que la situación es “muy mala” y el 41% “mala”.

Acotó que la pequeña empresa es la más afectada, ya que de acuerdo con la medición, dividiéndolas según su capacidad, 91% de las empresas pequeñas está en situación “muy mala” y que su situación es insostenible.

Explicó que eso sucede pues en la medida que las empresas son más pequeñas, tienen más dificultades para irse adaptando a los cambios del entorno, en términos de adquisición de materia prima o de tener diversidad de productos para modificar su estructura comercial.

Grandes y medianas

Andrés Rodríguez Ghersi indicó que la encuesta aplicada a los afiliados en Conindustria muestra que para la mediana empresa el 76% asegura que su situación está entre "malo y muy malo"; mientras que de la gran empresa, el 61% dice que está entre "malo y muy malo".