Los adultos mayores deben experimentar con emociones positivas. / Foto: ARCHIVO

20 Jul, 2016 | La soledad durante la tercera edad es uno de los grandes enemigos del bienestar de los adultos mayores, ya que su calidad de vida no solo implica un buen estado físico, sino también emocional.

La amargura y la tristeza roban las ganas de vivir a muchas personas mayores que se sienten solas. Por ello conviene recordar que cada persona, haciendo uso de su libertad, es capaz de ir más allá de las circunstancias sociales. Lo ideal es que los adultos mayores tengan un protagonismo importante en el seno de la familia y no se sientan nunca solos, según información publicada en www.webconsultas.com.

Las principales necesidades emocionales de las personas mayores son la necesidad de estima y reconocimiento. Necesitan sentir que forman parte de la sociedad y de su entorno cercano.

Para las personas mayores es muy gratificante rodearse de gente más joven porque se sienten más vivas y más alegres, y necesitan convivir con personas de edades diversas, que aportan formas de ver la vida y experiencias distintas a las suyas.

Está claro que la alegría también se contagia, y en esto influyen detalles tan sencillos como la forma de vestir. Por suerte, en la actualidad las personas mayores pueden apostar por la moda y vestir de una forma juvenil y con colores animados, y es que el modo de vestir influye mucho en el estado de ánimo.

Sin embargo, es frecuente que algunas personas mayores puedan llegar a sentirse solas. El motivo puede ser que no tienen familia, o sí la tienen, pero sus parientes actúan con indiferencia hacia ellos, que es contraproducente.

La soledad también puede surgir por los miedos y las inseguridades propias de la edad, o a causa de enfermedades crónicas que disminuyen su calidad de vida o les impiden desenvolverse por sí mismos.