En al menos dos días se abren los surcos para luego preparar la tierra con abono orgánico. / Foto: JHONNATAN BENITEZ

7 Jun, 2016 | Ante la falta de agua para el riego de los cultivos, el agricultor Ángel Díaz optó por sembrar solo el 25% de la cantidad que usualmente planta en la hectárea de terreno que trabaja en la comunidad de Catalán Adentro, municipio Arismendi.

Díaz explicó que en temporadas en las que dispone de suficiente agua llega a sembrar dos mil plantas de tomate margariteño y otras dos mil de berenjena; cantidades que para esta ocasión mermaron a 500 plantas de cada rubro.

Pese a las dificultades para mantener el riego en la plantación, Díaz junto a dos hombres más trabajan arduamente la tierra por considerar que “en producir está la vida de las personas, y la tierra nos da todo lo que necesitamos para vivir”.

Díaz, quien trabaja esos terrenos de Catalán Adentro desde hace 20 años, explicó que el primer paso para la próxima siembra ya fue dado. El semillero de tomate margariteño y berenjena está en marcha, mientras que alistan las zanjas que serán preparadas con abono orgánico.

La selección de semillas para esta nueva siembra fue hecha y preparada por el mismo Díaz, quien aseguró que saca las semillas de los mejores productos que ha cosechado, eso para asegurar así que la venidera zafra sea provechosa.

En lo que respecta al tiempo que tarde para cosechar el tomate margariteño y la berenjena, Díaz contabiliza 40 días para que las plántulas se desarrollen en el semillero, para luego ser trasplantadas a la tierra, donde cumplen un ciclo de 60 días, aproximadamente, hasta que los frutos estén listos.

Según la experiencia de Díaz, el tomate puede generar producción por al menos dos meses, mientras que la berenjena se extiende por cuatro meses; sin embargo, en el mercado local el tomate margariteño se vende con mayor facilidad que las berenjenas.

La cadena de comercialización que maneja Díaz es sencilla. Según afirmó, los productos son vendidos a los vecinos de Catalán Adentro en el mismo campo, mientras que existen algunos intermediarios que compran para revender en otras localidades.

Listo

Pese que a que en el terreno de Díaz se preparan para sembrar tomate margariteño y berenjenas, la tierra ya dio sus frutos. Este agricultor está por recoger la cosecha de 2.000 plantas de yuca.

Inseguridad

Los maleantes también suelen visitar a los agricultores. Díaz contó que suelen robar parte de la cosecha, y en el caso de su vecino le hurtaron una vaca, por lo que aprovechó para hacer un llamado para las autoridades ordenen mayor patrullaje por las zonas agrícolas.

Siembra

El agricultor Ángel Díaz explicó que de acuerdo a la planificación que maneja, en el mes de agosto iniciará el semillero de ají margariteño para proceder, luego del tiempo estipulado, a traspantarlo. Así podrá cosechar esa especie y ponerla a la venta durante los meses de noviembre y diciembre, cuando su demanda se hace mayor, gracias a que se acercan las fiestas de Navidad y fin de año