21 Jun, 2015 | “A uno le entra un fresquito cuando ve que gente que debe tomar decisiones que le afectan la vida a los demás, hace lo correcto; sobre todo en estos tiempos en que pocos quieren escuchar y otros tantos quieren pegar la carrera bajo el grito de ¡Sálvese el que pueda!”.
Siento que esta vez el tío Caballo Rojo trae una buena noticia, aunque no deja de meter la puya de la crítica. “Es que los muchachones justicieros y los dinosaurios blancos se dejaron de pendejadas y acordaron ir a las parlamentarias con la tarjeta de la Muda, lo que de entrada catapulta la ventaja de la oposición sobre el partido del régimen, que está según los estudiosos, casi dos a uno”.
Pero Caballo adelanta beneficios adicionales de la determinación de ir con una sola tarjeta a las elecciones. “Primero, así se refleja mejor la unidad; segundo, para la gente será más fácil votar y, algo muy bueno, es que ningún partido podrá decir que los votos le pertenecen. Además, eso obliga, espero yo, a que los candidatos escogidos por consenso y que anunciarán esta semana, sean los mejores, aunque ya sabemos que acá en el patio figura el amigo de la pequeña Lulú, que no cumple ese requisito. También espero que no se les haya ocurrido poner en el segundo puesto del circuito 1 a ese espécimen que, pese a su condición canina, no es el mejor amigo del hombre”.
Caballo se muestra optimista en relación con los próximos comicios, sobre todo porque siente que “los compinches del Heredero están de capa caída, pues el soberano se ha percatado que son embustes las excusas del gobierno sobre la mala situación que acá vive todo el mundo y que la culpa es toda suya suyita. Como será de triste la situación interna roja rojita que la campaña de primarias no se siente en ningún lado”.
Añade que la única mosca sobre el pastel son los voluntarios de Polito López, que no han dicho pío sobre la tarjeta única. “Además, está el problema de no saber cómo poner fin a la huelga de hambre sin que se perciba como una derrota. Esperemos que los seguidores de este dirigente no se encandilen con el interesante porcentaje de simpatía que tiene hoy en día y tomen la mejor decisión para el país, aunque no sea la mejor para el prestigio de Polito y su partido. Bueno es que también se avispen”.