…Necesita ser refundada, hay que cambiarla… / Foto: EFE

29 Sep, 2014 | De las pocas regiones que en Venezuela tienen vivos recuerdos de la segunda Guerra Mundial, una de ellas es Margarita. Como aquí cerca estaba una base militar muy activa, en Trinidad, a menudo venía su comandante y sus marinos y revolvían todo el ambiente, y por otra parte, los alemanes ejecutaron planes para sabotear el suministro de petróleo desde Venezuela a EUA, enviaron submarinos que en los años 43-44 estuvieron operando por estos mares y hundieron varios barcos petroleros. Habrá quienes lo recuerden, así como la bullaranga que se formó cuando cayó un dirigible, creo que por La Restinga, y todo mundo corrió hacía allá. Hasta correas se hicieron con sus lonas y sus encerados.

Pues bien, durante esa Guerra Mundial (1939-45), y en los primeros años de la postguerra, a Roosevelt (EUA), Churchill (Reino Unido) y Stalin (Unión Soviética), les llamaban los tres grandes. Ellos decidían las cuestiones más trascendentes de esa conflagración. Celebraron varias reuniones en el más absoluto secreto y sus conclusiones se conocían después que regresaban a sus respectivos países. En la de Teherán (dic. 1943) acordaron crear las Naciones Unidas, nombre propuesto por Roosevelt. Esa vez firmaron un documento donde declaraban "Tenemos la certeza de que gracias a nuestra armonía, lograremos una paz duradera". La armonía era de palabras, pues apenas terminaron las acciones bélicas comenzó la "guerra fría", hasta la caída del muro de Berlín, en 1989, y cuenten ustedes la cantidad de guerras habidas en estos sesenta años. Hoy mismo, se desarrollan varias.

Después de Teherán, se reunieron en Yalta (feb. 1944) y definieron el Consejo de Seguridad, cómo estaría integrado y cómo funcionaría; es cuando se reservan el derecho al veto, añadieron a Francia y a China y acordaron convocar a los países que habían declarado la guerra a Alemania a una conferencia en San Francisco, donde fundarían la ONU, el 24 de octubre de 1945. Asistieron 51. La guerra había terminado, Alemania y Japón fueron rendidos. Por supuesto, junto con Italia, España, Rumania y otros países derrotados, quedaron fuera de la organización, hasta muchos años después.

A varios de esos 51 países, los embajadores de EUA les exigieron romper relaciones con Alemania y declararle la guerra, para poder participar en la fundación. Frank Corrigan lo hizo con el canciller Parra Pérez, quien después presidió la delegación venezolana en la fundación de la ONU. América Latina estuvo bien representada en San Francisco. Lo importante es que ningún país cuestionó la estructura del Consejo de Seguridad. Por unanimidad lo aceptaron. Dividido el mundo en dos bloques, a la cabeza de cada uno estaba una gran potencia, todos convinieron en esa estructura hasta años más tarde, con la creación de los Países No Alineados (NOAL) cuando comenzaron las primeras objeciones. Pero no ha sido hasta ahora, desaparecido aquel escenario de 1945, extinguido igualmente el mundo bipolar, con la desintegración de la URSS y el debilitamiento internacional de EUA y siendo cada vez mayor el número de estados que propician un mundo multilateral, que parece llegado el momento para demandar una nueva estructura de la ONU, y de su Consejo de Seguridad.

Los cambios habidos

El cambio más trascendente ha ocurrido en América Latina. Mientras no se veía la Europa de De Gaulle, y estados antes alineados en la Europa oriental, ahora se suman sumisos a los intereses estadounidenses, se escuchan las voces de la nueva América Latina demandando cambios y llevando problemas que antes por ningún motivo eran asuntos de la ONU. La revisión de sus actas en los últimos 10 años revelan diáfanamente esas voces discrepantes del imperio.

Un estudio de Pedro Díaz Arcia: "Cronología de la soledad, Estados Unidos en las Naciones Unidas", editorial José Martí, La Habana, revela como EUA ha venido perdiendo influencia en la asambleas de la ONU: en 1961, el 42% de los países del NOAL votaban en coincidencia con EUA, y en 1988 apenas lo hacía el 21%, y en ese año 88, el 85% de los países coincidieron con Cuba, y desde hace 26 años se viene condenando el bloqueo a ese país con aplastante mayoría, y son numerosas las veces que EUA ha vetado resoluciones contra Israel. Ese dominio, contra la voluntad de tantos, ocurre por el funcionamiento del Consejo de Seguridad. Entre tanto, esas posiciones por imponer un funcionamiento democrático sigue aumentando en la ONU, como se vio en las recientes reuniones. Entre esas voces, destacó la del presidente venezolano, Nicolás Maduro. Pronunció un discurso que supo armonizar su experiencia de seis activos años de Canciller, la política que definió y orientó el presidente Chávez, y los principios establecidos en el preámbulo y articulado de nuestra Constitución. Seguros estamos que esas palabras estuvieron compartidas por la diplomacia de muchos otros países, y que reasumía el clamor de la mayoría de los pueblos del mundo. Demandó con fuerza la refundación de las Naciones Unidas, la reestructuración de su Consejo de Seguridad e incluso pidió más autoridad a la Secretaría General, de suerte que esté al servicio de todos y no de algunos imperios. Lo hizo con coraje, como lo destacó Fidel Castro, con precisión y mesura, y le llevó a abordar otras cuestiones de alto interés para la región, como la independencia de Puerto Rico y la solidaridad con Argentina en su lucha contra los perversos fondos buitres.

No es que esta Asamblea General de la ONU pasará a la historia, pero es indudable que las demandas de cambios en su estructura y funcionamiento, -no es posible que la mayoría de los países miembros apenas tengan fuerza declarativa y solo para algunas cuestiones-, se hicieron en un momento oportuno cuando los miembros permanentes del Consejo de Seguridad debieron escucharlos para la reflexión de sus gobiernos.

Elecciones en Brasil

Dilma Rousseff sigue subiendo en las encuestas, del 34% que tenía hace un mes, ahora está en 38%, mientras su adversaria Marina Silva, que había surgido con gran ímpetu al morir en accidente el candidato de esa alianza, llegó al 32%, pero ahora regreso al 29% que tenía hace un mes. El PT, con Lula a la cabeza, la ha desenmascarado como una candidata de la derecha, apoyada por los grandes empresarios. ¿Y saben ustedes con quién están los más poderosos medios de comunicación? Por supuesto, que se imaginan. Su consigna es que ¡Marina es el cambio! Y podemos suponer a cuál cambio se refieren. Así mismo ocurrió en todas las elecciones que ganó Chávez. En la última encuesta sobre quién ganaría en la segunda vuelta, Dilma aparece arriba con sensible ventaja. Aquí en Venezuela, la oposición votaría por la candidata del FMI.

Felicitacionesa mi amiga Milka Olivero, a quien la Universidad de Margarita la declaró con solemnidad "Heroína de Nueva Esparta"…

El Sol anunció ayer que los concesionarios están en crisis por falta de inventarios y regulaciones; noticias similares he visto en otra prensa, y parece que realmente están demoradas las divisas para reponer las tiendas para estas navidades. Otras veces ha ocurrido lo mismo, y suponemos que será resuelta…

No sé A quién se le ocurrió crear un Día Mundial del Arepazo, si la arepa es tan nuestra, que no sé que en otros países se use en sustitución del pan o del plátano. ¿Por qué llamarlo mundial? Pero aquí lo celebraron!..

En cambio, buena la idea del concurso para elegir la Señora Nueva Esparta, que podrá verse el sábado en Venetur. Mariela sería una extraordinaria candidata…

El vice Jorge Arreaza anunció hace poco que "el Consejo de Vicepresidentes analiza planes productivos de la nación", lo que nos hace pensar que a pesar de que no se divulgan sus conclusiones y ninguno de los vices amplía esa información, en breve estarán en ejecución, y a más largo plazo, tendrá sus productos…

La editorial El Perro y la Rana anduvo rápido, desde hace días está en librerías el estudio de Marta Harnecker ganador del premio Libertador al Pensamiento Crítico, Un mundo a construir, ("nuevos caminos"), que se supone el PSUV recomendará no a su militancia, que es mucha, sino a sus cuadros.