El Papa Francisco. / Foto: REUTERS

2 Ene, 2014 | El Papa Francisco deseó una vida llena de alegría y esperanza a todo los habitantes de la tierra e indicó que el mayor desafío para el 2014 será disminuir el contraste entre la riqueza y la miseria.

De igual forma, hizo un llamado a no mantenerse indiferente e inmóvil ante la violencia e injusticia en el mundo.

"Es un compromiso de todos construir una sociedad más justa y solidaria. Es hora de parar. Creo que es necesario que detengamos en este camino de la violencia y busquemos la paz", dijo durante la primera misa ofrecida este miércoles desde la basílica de San Pedro, en el Vaticano.

En este sentido, el Sumo Pontífice condenó la guerra y la violación de los Derechos Humanos en distintas naciones del mundo.

El mensaje estuvo centrado "en la fraternidad, fundamento y camino para la paz", reseñó CNN.

Cada primero de enero, la Iglesia Católica celebra la Jornada Mundial de la Paz al oficiar una misa desde su sede principal en el Vaticano.