16 Sep, 2020 | En la selva sabes a qué atenerte; en la civilización, no.

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No desanimes a alguien por intentar triunfar donde tú fracasaste. Es muy difícil que dos personas cometan los mismos errores.

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Si los animales pudieran hablar, el amor que muchos dicen profesar por ellos acabaría.

Hay quienes aman solo aquello que calla sumisamente, que no contradice ni opina.

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Lo único que espero de cualquier docente es que sepa leer y escribir, pero bien. Nada más.

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Lo que más temo de la muerte es que luego nos veamos en la misma película.

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Darle a tu hijo todo lo que no tuviste, quizá le evite alcanzar todo lo que puede llegar a ser. Sé comedido.

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El saber tiene caminos que la labia desconoce. Estudia.

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Cada amor de mandar al carajo todo es una vida en sí mismo,

una muerte, un renacimiento.

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El egolatra no tiene amigos, tiene competencia.

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Quien lee desde el ego, se enfoca solo en los errores que puede hallar en una obra; mas quien lo hace desde la sabiduría, pone su atención en qué aprenderá del contenido.

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Quien lee desde el ego, se enfoca solo en los errores que puede hallar en una obra; mas quien lo hace desde la sabiduría, pone su atención en qué aprenderá del contenido.

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La comparación constante es un desgaste total, una fisura por donde se evidencia claramente la falta de conocimiento de un hombre sobre sí mismo.

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La más clara muestra de mediocridad es la imperante necesidad de sacar a flote a cada instante los errores ajenos.

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En realidad, nadie tiene razón en nada. El hombre posee solo una certeza: sin importar el camino que escoja, morirá.

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El que especula, siempre consigue la respuesta que desea, aunque esta no sea verdad.

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Cuando los mezquinos se disponen a competir y no pueden superar al talento ajeno, recurren a la calumnia. De alguna manera deben ganar, así sea dañando, mintiendo. Ellos son, en esencia, un retrato claro de la miseria.