Los cuerpos de seguridad han reportado un alza e este tipo de delitos. / Foto: ARCADIO MILLAN

2 Nov, 2018 | En los últimos meses el vandalismo volteó su mirada a algo poco común. Anteriormente, en los delitos contra la propiedad se hurtaban equipos domésticos, computadoras, teléfonos, entre otros objetos, pero ahora lo que buscan los delincuentes son materiales metálicos como hierro, cobre o aluminio para venderlos y obtener dinero.

Lamentablemente sitios como escuelas, teatros, museos, canchas deportivas, piezas de arte y hasta el tendido eléctrico han sido las presas de este tipo acciones que cada vez se vuelven más comunes.

Hace unos meses el Escudo de Armas de La Asunción, un símbolo de identidad, pieza escultórica del margariteño Humberto Cazorla, fue presa de este delito. La importancia y el valor patrimonial de la obra hizo que todos los cuerpos de seguridad se activaran y en pocos días fue recuperado. Lamentablemente no es así con los pupitres de las escuelas, lo aros de las canchas de baloncesto, rejas y postes de luz que han sido sustraídos.

El director del Instituto Autónomo de Policía del Estado Nueva Esparta (Iapolebne), José Otoniel Morales Quiroz señaló que la Guardia Nacional Bolivariana es la responsable de supervisar los sitios que compran este tipo de materiales estratégicos.

Destacó que se hizo un plan de inspección de aquellos locales donde se compran metales para que se verifique la procedencia legal. “Es necesario saber como lo obtuvo, quien se lo compró, todo, para buscar a las personas que tengan participación en este delito”.

Aseguró que los sitios más vulnerables son las comunidades aisladas de Península de Macanao, Tubores y Díaz. “La semana pasada capturamos a unos sujetos que estaban cortando un poste”.