Máscaras de pestañas / Foto: CORTESÍA

15 Oct, 2018 | Estuve un poco ausente de mi amada sección “Bella sin Excusas”, pero aquí me tienen de vuelta para compartir y aprender de este maravilloso mundo de belleza, estilismo y maquillaje.

Hoy estaremos hablando de la mascara de pestañas conocidas también como “rímel”

Cada mujer necesita un tipo de cepillo de rímel, ya que estos pueden alargar, dar volumen o rizar las pestañas. Es por ello que es recomendable tener en cuenta su forma y fibras, a continuación te mostramos para qué sirve cada uno y cuál es el que necesitas.

1.- Si buscas volumen

Para que tus pestañas luzcan más largas y destaquen tus ojos, debes optar por el cepillo en forma de pino. Estos se caracterizan por tener ancha la parte de abajo y delgado arriba. Es perfecto para las mujeres que tienen pestañas cortas.

2.- Si buscas definición

Olvídate de los grumos y de las pestañas pegadas utilizando este cepillo, el cual permite separar cada uno y otorgar mayor definición. Estos son de plástico pequeños con cerdas muy juntas.

3.- Si buscas rizarlas

Este tipo de cepillo ayuda a levantar las pestañas en las esquinas y otorga mayor elevación en la mirada. Este cepillo tiene una curva y sus cerdas están un poco separadas

4.- Si buscas longitud

Cuando el crecimiento de tus pestañas es disparejo es complicado aplicar el rímel en todas ellas. El cepillo triesférico es perfecto para ello, ya que cuenta con tres esferas que permiten distribuir mejor el producto.

5.- Si buscas intensidad

Para crear mayor impacto en tu mirada puedes optar por el curvo, esta se diferencia del cepillo para rizarlas porque su forma es casi como la letra S.

6.- Si buscas separarlas

Este tipo de cepillo no solo es ideal para otorgar mayor definición en las pestañas, sino que permite separarlas cuando se juntan al aplicar el rímel.

7.- Si buscas retirar grumos

Cuando se queda mucho del producto en las pestañas es complicado retirarlo sin manchas los ojos. Puedes hacerlo con este cepillo, sus cerdas están muy separadas lo que permite eliminar el exceso de rímel sin contratiempos.

En cuanto a los colores, lo ideal es escogerlos según el de tu iris:

Negro: Sienta bien a todos los ojos. Su principal ventaja es que sirve tanto para día como para noche.

Marrón: es el más discreto y natural. Se suele utilizar durante el día. Además aporta volumen a tus pestañas sin endurecer la mirada.

Azul: Será perfecto para las que tengáis los ojos color miel o almendra.

Rosa y morado: Genial para los ojos oscuros o verdes.

Transparente: El rey de la discreción; el comodín ya que resulta el más natural de todos.