Sirenas y tritones insulares disfrutan de las costas margariteñas en busca de mejorar condiciones para futuras competencias, y a su vez se divierten disfrutando del paisaje marino en lo que ellos consideran su santuario sagrado: el mar. / Foto: CORTESÍA CAAIM

23 Sep, 2018 | En ocasión de celebrarse el pasado 15 de septiembre el Día Mundial de las Playas, la Asociación de Vela de Nueva Esparta (Asovene) cedió sus instalaciones para que los cultores de la natación en aguas abiertas realizaran un encuentro.

Sirenas y tritones compartieron con las destacadas dirigentes de esta disciplina Carmen Gamboa y Olivia Noriega, quienes relataron sus experiencias dentro de esta disciplina acuática en años recientes.

Las dirigentes expresaron su pesar por el descuido que presenta la pileta del Complejo de Piscinas Oliver Núñez en Guatamare, ya que, indicaron, esa instalación deportiva fue fruto de una lucha de padres, representantes, clubes, dirigentes y nadadores para el desarrollo de la natación y actividades acuáticas conexas.

Actualmente, su bajo nivel de mantenimiento influye en la migración del talento a otras latitudes o de actividad deportiva. Igualmente destacaron los logros obtenidos por los nadadores insulares en tiempos pasados y el alto nivel de la disciplina, en la que nuestro estado contaba con más de 300 atletas en todas las categorías.

Este evento contó con la presencia del coordinador deportivo del Colegio Guayamurí, Alejandro Aparicio; Ritchie Laesker por Asovene y la entrenadora María Fernanda Alvarado, quien organizó esta cita.

La atleta Cruz Natacha Rivero se refirió a la influencia de la Virgen del Valle en los practicantes de este deporte. “La isla de Margarita está rodeada por el mar, y el mar pertenece a Nueva Esparta, nosotros consideramos el mar como el santuario de la Virgen del Valle y a su vez nosotros honramos a la Virgen y al mar, nadando”.

PETICIÓN DE PROTECCIÓN

La entrenadora María Fernanda Alvarado agradeció la presencia de los nadadores y personas invitadas, destacando la asistencia de los atletas del club de aguas abiertas del Colegio Guayamurí (Marco Elizalde, Paola Espinosa y Carlota Mata), además de la pequeña de cinco años Victoria Tovar, quien ya está dando sus primeras brazadas en esta exigente disciplina. Igualmente estuvieron presentes los integrantes del club Estrellitas del Concorde, e integrantes de la selección máster de natación de Nueva Esparta.

Los presentes realizaron una petición de protección a Dios y a la Virgen del Valle frente a un pequeño altar preparado para la ocasión, y seguidamente se dirigieron a la orilla de playa Concorde, iniciando una travesía hasta el sector La Muralla en playa Valdés y retornaron a su punto de origen, en un recorrido aproximado de cinco kilómetros.

Luego de esta dura actividad, compartieron un refrigerio para reponer energías y comentar experiencias natatorias y deportivas.

Para finalizar, la entrenadora y dirigente extendió una invitación a todas aquellas personas que deseen practicar esta disciplina, ya que considera que la natación en aguas abiertas es una gran fuente de salud y bienestar físico, indicando además que no se requiere pago de inscripción o mensualidades.

HISTORIA

La natación en aguas abiertas se desarrolla en espacios abiertos y naturales, como en mar abierto, bahías, canales, lagos o ríos. Dentro de este concepto, la Federación Internacional de Natación (FINA) distingue entre los eventos cuya distancia sea igual o superior a los 10 kilómetros, en cuyo caso los denominará como “natación marathon”, también conocida como natación de larga distancia.

La máxima competición internacional de los deportes acuáticos es el Campeonato Mundial de Natación, organizado por la FINA desde el año 1973, la cual incluyó la natación en aguas abiertas por primera vez, en los Mundiales de 1991 en Perth, Australia.

En la actualidad, los campeonatos de aguas abiertas se celebran los años impares en el marco del Campeonato del Mundo de Natación, y los años pares de forma independiente, según refiere el autor Antonio Hernández.

Esta disciplina es ejecutada por sus cultores en el estilo crol y actualmente está incluida en el calendario de todas las citas deportivas del continente americano (Bolivarianos, Centroamericanos, Suramericanos, Panamericanos), y además en los Juegos Nacionales de cada nación.

En Venezuela, el “Cruce al Río Orinoco” se considera la prueba cumbre de esta disciplina.