17 Jul, 2018 | El pasado 9 de julio se realizó un acto en el Salón Matasiete de la Residencia de Gobernadores de Nueva Esparta con motivo del Decreto del Ejecutivo regional consagrando tal fecha como Día Regional de la Transparencia y de la Lucha Anticorrupción en reconocimiento a los 10 años de la Organización Nacional para la Prevención de la Corrupción (Orpanac), fundada por el abogado Juan Carlos Torcat Muñoz.

Fue un día especial que marca un antes y después en el combate contra un flagelo que se ha convertido en un letal enemigo de la democracia, la justicia y la dignidad humana. Un acto que revela, por un lado, el compromiso asumido por la Gobernación de generar una política de transparencia en su actividad y por el otro lado, el justo reconocimiento a una organización de la sociedad civil que ha venido realizando sus mejores esfuerzos ante una lucha que luce complicada y cada día más compleja, porque hoy existe la necesidad de demostrar claridad y honradez en la gestión pública.

Un efectivo control de la gestión pública depende de dos factores claves, a saber, la voluntad política de quienes gobiernan y luego del grado de participación ciudadana en la observación, diseño y corresponsabilidad en las políticas públicas.

Este Decreto representa un paso de significativo avance en la conquista de la transparencia y contra la corrupción y constituye una obligación y un compromiso solidario con los neoespartanos y su destino hacia una sociedad insular ética y transparente.

El Consejo Legislativo Regional aprobó una Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública que contó con el apoyo activo y consecuente de Orpanac, y que representa un instrumento legal que permite el ejercicio de un derecho fundamental en el mundo democrático.

Hoy, cuando vivimos un momento histórico difícil, cuando nuestro país aparece herido y enfermo por la opacidad y las tinieblas, desde estas islas llamamos a no rendirnos ante el becerro de oro de la corrupción, como lo pregonó el Maestro Prieto y exhortamos a seguir luchando contra los obstáculos y muros de una realidad adversa, lo sabemos, a levantarnos erguidos ante cada tropiezo, conscientes de estar transitando el camino correcto y acertado hacia el porvenir.

Sirva esta oportunidad que marca un hito en la historia política contemporánea de Nueva Esparta para ratificar que la vigencia plena y efectiva de este Decreto constituye un extraordinario reto y compromiso de todos para lograr concretar una política regional de respeto a los derechos humanos y de probidad en el manejo de los recursos públicos que genere confianza en los ciudadanos convirtiendo a nuestro estado en un modelo y ejemplo que marcha hacia el Gobierno Abierto, el nuevo paradigma de la democracia. Así lo creemos y así lo esperamos.