Youssef Zagbour, es el presidente de la Asociación de Comerciantes del municipio Marcano, Acepromar. / Foto: ARCHIVO SOL DE MARGARITA

18 Jun, 2018 | Los vendedores de productos alimenticios son el último eslabón de la cadena, y el consumidor tiene el contacto cotidiano con los comerciantes de todas las nacionalidades, en especial los de origen árabe, quienes en vista de las circunstancias difíciles del puerto libre han tenido que anotarse con los nuevos rubros, incluyendo los alimenticios, para garantizar el flujo de caja diario.

Según el presidente de la Asociación Civil de Comerciantes, Empresarios y Profesionales de Marcano (Acepromar), Youssef Zagbour, en vista del alza casi diaria de esos precios, la gente piensa que los comerciantes son los causantes de los incrementos continuos, “cuando en realidad el empresario recibe los productos con precios altos y en forma permanente. Afirma que no les queda alternativa sino trasladar eso al consumidor final, para no caer en pérdidas, dijo el dirigente empresarial de Juan Griego.

Deplora que en la actual situación también haya algunas manifestaciones de xenofobia, como las observadas en Marcano hace una semana, donde grupos aislados de manifestantes quisieron arremeter y hasta saquear comercios, lo cual ameritó la actuación de los organismos de seguridad.

Indica que en el caso del norte de la isla de Margarita, la actividad comercial de venta de alimentos se centra principalmente en Juan Griego, y a diferencia de ciudades como Porlamar, en esta población el contacto de la gente es directo con el comerciante, independientemente de su nacionalidad. Agrega que, es obvio, que al incrementarse el precio de un artículo, culpan al vendedor y lo acusan de especular, dijo al salir en defensa en cierta forma de sus paisanos.

“La crisis que padece el país es de origen multifactorial y sería injusto atribuirla a un solo sector o elemento, y peor todavía a una determinada comunidad. Tampoco es recomendable caer en la xenofobia. Venezuela siempre ha sido un país abierto a todas las corrientes, sin distingo de religión, raza o nacionalidad. Incluso, así lo establece la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”, dijo.

CERO ANARQUÍA

En cuanto a la economía informal, que ha multiplicado su presencia en las calles de la ciudad crepuscular, al igual que otras ciudades del estado Nueva Esparta y del resto del país, Zagbour fue enfático en que cada municipio posee ordenanzas que prohíben las ventas ambulantes y que además regulan la actividad legal con el correspondiente pago de patentes comerciales.

En tal sentido, está de acuerdo con las acciones que ha emprendido la alcaldesa del municipio Marcano, Karina Aguilera, en relación a los vendedores ambulantes, para reorganizarlos y reubicarlos en sitios concretos, y que no sigan desperdigados por todo el casco urbano como ha venido ocurriendo.

Entiende que la actual situación lleva a muchos a la calle a buscar el sustento, por cuanto un salario mínimo no alcanza para nada, pero considera que tampoco se puede permitir que hasta los pescados se expendan en una acera, sin ninguna medida sanitaria, y menos que estén revendiendo productos subsidiados de la bolsa CLAP, como lo ha denunciado la propia Alcaldesa.

Insiste en que hay que “humanizar” Juan Griego, y poner fin a la anarquía en las calles, pero con el consenso de todos los actores.

En vista de lo ocurrido la semana pasada en Juan Griego, y que pudo haber derivado en mayores desórdenes dentro del área comercial, Zagbour llamó a la paz, tranquilidad y sana convivencia, como siempre ha sido.

Informó que convocará a una asamblea con el sector comercial del municipio Marcano, para analizar la problemática e incluso para instar a que, en la medida de lo posible, no se ayude a precipitar la crisis, sino que haya relación costos-ganancias de manera ponderada.

“Soy el primero en rechazar la especulación. Si hay casos puntuales hay que denunciarlos”, puntualizó Youssef Zagbour.