Con base en las denuncias que formulan las víctimas de violencia de género, se abren los expedientes y se investiga. / Foto: CORTESÍA

18 Mar, 2018 | Entre la tranquilidad de la noche se escucha el grito desgarrador de una vecina, en una comunidad donde todos escuchan, pero “nadie se mete”, “porque son peleas entre marido y mujer”, es lo que suelen decir.

Al otro día, los golpes propinados a la mujer por “su hombre”, sí son la comidilla del pueblo. El moretón en la mejilla y los ojos saltones de tanto llorar revelan que en esa vivienda la violencia hizo mella.

Algunas víctimas de la violencia denuncian, pero la mayoría mantiene el silencio por miedo a otras escenas similares. Entonces, es cuando vuelven a repetirse los episodios domésticos que nadie quisiera protagonizar. Otras mujeres sí cobran conciencia y denuncian tales actos de agresión ante las autoridades.

Según la Fundación Nueva Mujer Margarita, en el estado Nueva Esparta se procesa un aproximado de mil 900 causas anuales por violencia contra la mujer. “La problemática de la violencia encuentra su mayor desafío en la educación e información como base fundamental de la prevención y la sensibilización de todos los órganos públicos involucrados en el proceso”, asevera Cristina Conti, directora fundadora de esta asociación civil sin fines de lucro.

COMO HORMIGUITAS
La Fundación Nueva Mujer Margarita realiza un trabajo de hormiguita contra “viento y marea”, lo cual les permite hacer un balance positivo a la fecha, a pesar de las limitaciones actuales, la situación del país y el incremento de casos.

Conti evalúa positivamente los nueve años de existencia de institución que representa, la cual ha organizado para hoy un conversatorio sobre los roles que cumple la mujer en la sociedad, y además cómo salir triunfante, a pesar de los atolladeros a los cuales
se enfrenta cada día.

“En la organización hemos centrado nuestras acciones en el tratamiento y prevención de la violencia contra las mujeres, la igualdad de género y el empoderamiento femenino.

Mantienen dos centros de atención a las víctimas, con sedes en las Prefecturas de Pampatar y Porlamar, de los municipios Maneiro y Mariño, respectivamente. Sin embargo, están abiertos para todas las mujeres del estado Nueva Esparta, aclara.
En dichos espacios se trabaja en horario comprendido entre 8:00 de la mañana, y 12:00 del mediodía, de lunes a viernes.

En los centros de rehabilitación atienden un promedio de 200 víctimas al año, las cuales en su mayoría son remitidas por los órganos receptores de denuncias, “pero atendemos también a aquellas que acuden por iniciativa propia”, señaló.

“Allí se brinda tratamiento psicológico y orientación legal a las víctimas, mientras que el programa de empoderamiento e igualdad de género lo desarrollamos a través de actividades socioeducativas como charlas, talleres, foros, conversatorios, entre otras, dirigidas a los centros educativos, empresas públicas y privadas, comunidades organizadas y público en general. Precisamente el evento de hoy, a las 10:00 a.m, en el Centro de Convenciones, forma parte de ese programa.

Esta actividad está enmarcada en el mes internacional de la mujer y en la Feria Internacional del Libro, porque han coincidido las fechas y eso brinda espacios para realizar la jornada donde se abordará el tema del liderazgo femenino, el empoderamiento, los roles de las mujeres, los desafíos que enfrentan y cómo ser exitosas, siempre que haya voluntad.