Los Nacionales tienen marca de 88-55 está a sólo 4 juegos de los Dodgers de Los Angeles (92-51) en la carrera por la mejor del Viejo Circuito. / Foto: CORTESÍA

12 Sep, 2017 |Houston. Otro título más de división ya está en poder de los Nacionales de Washington tras haber completado una temporada dominante en la División Este del Viejo Circuito y de nuevo también se enfrentan al "maleficio" de superar el pobre rendimiento que luego han tenido en los playoffs.

Los Nacionales tienen marca de 88-55 está a sólo 4 juegos de los Dodgers de Los Angeles (92-51) en la carrera por la mejor del Viejo Circuito, lo que de conseguir le permitiría empezar en casa todas las series de la fase final de la Liga Nacional que disputen.

Tampoco está decidida la ventaja de campo para la Serie Mundial con los Indios de Cleveland de líderes que tienen marca de 87-56 y los Astros de Houston (86-57), que están en la pelea junto a los Dodgers y los Nacionales.

Al margen de lo que puedan conseguir hasta el final de la temporada regular, lo que si es importante para los Nacionales es la excelente labor que han realizado hasta ahora con un gran pitcheo y ofensiva demoledora.

Hay que celebrar el éxito que los Nacionales ya tienen por varios años, quizás lo más difícil de hacer en cualquier deporte profesional.

Durante las últimas seis temporadas han ganado 546 juegos de ronda regular, la segunda mejor marca de las Grandes Ligas, lo que dice mucho en favor de la organización, sus dueños, la directiva, los jugadores y todo el cuadro técnico, dado que el éxito en el deporte del béisbol sólo pudo llegar gracias a la labor de equipo.

Pero a la vez, los Nacionales han ganado tanto que ahora todo el mundo espera que lo hagan siempre y en especial cuando lleguen los playoffs.

Los Nacionales ya tienen en su haber el cuarto título de la División Este en seis temporadas, y eso es precisamente lo que se planteó hacer Mike Rizzo cuando se unió al club como gerente general asistente en el 2007 y dos años después fue ascendido al de mayor responsabilidad.

Rizzo ha conseguido las dos metas que se puso como objetivos y que fueron la de construir un proyecto que pudiese mantener el éxito a lo largo de los años y hacerlo con la incorporación del lanzadores que colocasen rectas de humo.

Pero para que esa gran organización que ha construido pueda pasar a la historia tendrán que llegar los títulos de la Serie Mundial y los Nacionales todavía no tienen ninguno.

En sus tres viajes previos a la postemporada, no han ganado una serie y ahora volverán a intentar buscar ese campeonato en octubre y tienen derecho a ser colocados como favoritos con una rotación de ensueño y el bullpen muy eficaz.

Se trata de los lanzadores Stephen Strasburgh y Max Scherzer como líderes destacados, perfectamente manejados por el veterano piloto Dusty Baker, que ha sido otro de los factores del éxito conseguido por los Nacionales.

La alineación, con el candidato al Jugador Más Valioso (MVP) Anthony Rendón viviendo la temporada de su vida, es quizás la más completa de la Liga Nacional, especialmente ahora que el campocorto Trea Turner regresó desde la lista de lesionados.

El equipo no respirará hasta que el jardinero Bryce Harper, marginado con una lesión en la rodilla izquierda desde el 12 de agosto, esté de vuelta en el terreno, pero todavía tiene tres semanas para hacerlo.

Baker, que tampoco tiene en su haber ningún título de la Serie Mundial, ha conseguido por novena vez que un equipo bajo su dirección esté en los playoffs, y sin duda, los Nacionales son los que le ofrecen la mayor oportunidad de lograrlo.

Por eso el béisbol de las Grandes Ligas está feliz de que ya esté clasificado para los playoffs un equipo que hace que el deporte del béisbol tenga asegurada una gran competición en la fase final.