27 Mar, 2017 | Este jueves el país amaneció con una gran noticia: la inauguración de la primera Expoferia Venezuela Productiva, una extraordinaria iniciativa del Gobierno que sirvió para impulsar las enormes potencialidades que tiene la economía nacional y consolidar el desarrollo de nuestra nación, a través de nuevas soluciones y alternativas.

La exposición se realizó en el Poliedro de Caracas y contó con al menos 300 puestos instalados. Allí se dieron cita comerciantes, empresarios, representantes de los sectores productivos del país, organizaciones del Poder Popular y las autoridades nacionales; justo lo necesario para darle vida a ese nuevo sistema económico productivo y diversificado que necesitamos y del que hemos hablado.

Fue una fabulosa oportunidad para que los emprendedores mostraran su capacidad de crear, de reinventarse y solucionar, intercambiando experiencias con el sector público y privado, y abriendo la posibilidad de que se establezcan importantes alianzas y relaciones comerciales. Sin duda un éxito rotundo.

La realización de una actividad tan importante como esta debe venir acompañada del conjunto de medidas que hemos venido exponiendo en estas columnas a modo de propuestas. Entre estas, hoy quiero hablarles de la necesidad de reorganizar los entes del sector productivo, lo que posibilitaría simplificar y facilitar procesos económicos, unificar criterios y maximizar las capacidades de gestión económica del Estado.

También lograría un incremento de la eficiencia institucional del Gobierno Bolivariano para la gestión de procesos económico-productivos, reactivaría la infraestructura productiva pública y privada, y optimizaría los procesos de producción, las importaciones y exportaciones.

Otra de las políticas es la reactivación del mercado interno. Es posible incrementar la oferta de bienes de consumo y de servicios mediante la reactivación de su infraestructura industrial y la asignación de divisas orientada a productos con bajo componente importado, materia prima, equipos e infraestructura para reimpulsar la producción.

Su aplicación lograría además de satisfacer las necesidades internas, generar excedentes de productos exportables y nuevas divisas, aumentar el empleo productivo y contribuir con la atenuación de la inflación por incremento en la oferta de bienes y servicios.

Apostando todo a la producción solucionaremos cualquier adversidad que se presente. Podemos lograrlo. Hagamos de Venezuela una verdadera potencia productiva.