26 Feb, 2017 | Nuestro destino y centro de labores era Puerto Ayacucho, la capital del estado.

El grandioso Amazonas con sus tepuyes que son las formaciones expuestas más antiguas del planeta, no me podía creer tanta grandiosidad inmersos en aquel espacio misterioso y mágico, allí definitivamente se siente más el amor, se siente más todo, la sensualidad brota desde cada espacio, formándose un ecosistema sensual imposible de describir, solo sentir, nosotros nos acurrucábamos en una relación de éxtasis cercana a la muerte, en una meditación permanente que nos aislaba de todo.

Era un regalo de los dioses, que caía como un maná sobre nosotros y nutria cada fibra de nuestro cuerpo hasta convertirlo en un fuente inagotable de luz y sensualidad que nos envolvía como un halo y nos hacía viajar en una alfombra mágica hacia el templo del amor, allí aprendí la diferencia entre una eyaculación local a un orgasmo total.

Continuando con los tepuyes su nombre proviene de una voz del idioma indígena pemón que significa montaña o morada de los dioses, con razón estábamos en las moradas de los dioses, definitivamente dios premia el Amor, enamorados avanti, avanti con el Amor que es la única verdad verdadera.

Los tepuyes tienen tendencia a estar individualmente aislados en vez de formar parte de una cadena común, en esto también se parecen a los enamorados, aislados en su burbuja de Amor sintiéndose hablando poco, acariciándose observándose, ensimismados, sin estar pendientes de lo que los rodea, de vez en cuando bajan de su templo amorosa y compartenen con sus amigos, exponiendo su amor.

Esta característica de aislamiento hace que en los tepuyes se den formas evolutivas únicas tanto vegetales como animales, sobre la cima de estos tepuyes nacen ríos y gigantescas cataratas, siendo la más famosa el Salto el Ángel, la cascada más alta del mundo. Qué grande es Venezuela Dios Mío.

Al llegar, ya al siguiente día estaba en consulta.

Donde tuve mi primera gran experiencia.