23 Ene, 2017 | Sean mis primeras palabras para agradecerles a los lectores de toda Venezuela y el exterior por enviarme gratos comentarios por estas columnas y pedirme que siga explorando temas de interés para todos. Destaco la total libertad expresión que me ha garantizado siempre SOL DE MARGARITA. Muchas gracias por tal deferencia.
Deseo volver a convocarlos a aceptar el maravilloso reto de seguir construyendo una nación venezolana Siglo 21, a tono con sus enormes potencialidades. Sabemos que hoy en día lo que necesitamos para lograr esa meta es mejorar la productividad. Así conseguiremos que la cadena de valor crezca y tendremos mejores resultados económicos generales. Trabajemos en eso con todas nuestras fuerzas.

Pongamos en práctica lo aprendido. Reforcemos nuestras fortalezas, sigamos simplificando trámites, hagámosle frente a las debilidades capacitando, dotando y motivando correctamente a nuestro valiosísimo talento humano para alcanzar resultados de excelencia. Combatamos frontalmente la corrupción. Juntos podemos hacerlo. Solos no lograremos nada.

Tengamos en cuenta que la eficiencia es la óptima utilización de los recursos disponibles para la obtención de resultados deseados. Es el aprovechamiento inteligente de los medios financieros, infraestructuras y recurso humano; mientras que la eficacia es hacer lo necesario para alcanzar los objetivos deseados o propuestos.

La superación de las crisis de base económica necesitan justamente eso: Eficacia y eficiencia. Planificación, pragmatismo, transparencia y desburocratización. Sin gerencias positivas, abiertas a la crítica, con capacidad de autocrítica y de escuchar a los responsables de los procesos, los logros son remotos, inalcanzables, con muchos errores en el camino. Errores que siempre afectarán a los ciudadanos.

Estamos haciendo el camino para que la victoria le permita al glorioso pueblo venezolano seguir desarrollándose en paz y justicia. Si cada uno hace su parte será más fácil y rápido. No podemos dudar, tenemos que actuar ya.

Hay mucho hecho, pero es mucho más lo que resta por hacer. Paso a paso es como se avanza. Pisando firme. Sabiendo que no queda margen para equivocaciones. Pensando en grande. Sumando, nunca expulsando. Recuerden que a esta maravillosa nación llamada Venezuela la construimos todos. Indivisible, con libertad y justicia para todos.
¡Inspirados en Dios y nuestra amada Virgencita del Valle seguro podremos salir adelante! Luchemos hasta vencer. Un abrazo a todos.