Porlamar
23 de abril de 2024





EL TIEMPO EN MARGARITA 28°C






Ruda tarea traer a casa "pan nuestro de cada día"
La incertidumbre marca inicio del año 2017. El vicario general de la Diócesis de Margarita, presbítero Darío Salazar, dijo que la mayor angustia del venezolano es cómo adquirir alimentos.
Yanet Escalona | @yanetescalona

Foto: CORTESÍA

Presbítero Darío Salazar, vicario general de la Diócesis de Margarita. / Foto: CORTESÍA

16 Ene, 2017 | Al inicio de cada año, las personas se envuelven de expectativas y elaboran planes y proyectos, confiados en Dios y en el esfuerzo individual o grupal. “En general, se hace una retrospectiva y miramos hacia adelante, con la esperanza de ser mejores cada día, pero particularmente este 2017 arranca con incertidumbre, lo cual dificulta que las cosas se concreticen”, aseveró el presbítero Darío Salazar, vicario general de la Diócesis de Margarita y párroco de San Juan Bautista, municipio Díaz.

-Es normal que al arrancar un año surjan propósitos y nos lancemos a vivir. Sin embargo, aparte del enfoque personal hay que tomar en cuenta la situación-país porque no estamos ajenos a la realidad de nuestro entorno.

Indicó que junto con las iniciativas personales para ascender o ser exitosos dentro de lo laboral, la inquietud del venezolano es cómo llevar el alimento a las casas, porque el dinero no rinde.

“También es cierto que no hay suficiente producción en el país. La oferta de productos está limitada significativamente. No hay otra opción sino aceptar lo que hay, en lo que respecta a artículos regulados o con precio justo. En el comercio aparecen productos, pero con alto costo, y no todo el mundo se puede dar el ‘lujo’ de acceder a ellos”, expresó el sacerdote.

Asimismo, la baja productividad y, por ende, la escasez de bienes y servicios fundamentales incide en mayor nivel inflacionario, agrega el vicario de la Diócesis.
Admite que en el contacto diario con la gente y los feligreses en general se palpa esa angustia.

Movimiento circular

El padre Darío resalta la actitud de quienes, como cabeza o jefe de familia, a diario enfrentan diversas situaciones para llevar al hogar “el pan nuestro de cada día”.

Le sobran testimonios sobre las maromas que hacen para rendir lo poco y de cómo quienes están al frente de un hogar prefieren dejar de comer y “sacrificarse” en función de garantizar mayor bocado al niño o al anciano que tienen en casa.

La “cabeza de familia”, opta por “distraer” o “engañar” el estómago con lo que tenga a la mano.

Ser solidario

Pese a todo, ve positiva la solidaridad de muchos. En especial es admirable cómo los integrantes de una familia se ayudan y son solidarios, refiere el sacerdote.

-Cuando se puede, se practica la solidaridad y caridad.

En el plano institucional, confiesa que la actual situación ha afectado hasta las parroquias, las cuales antes recibían ayuda o donaciones de productos alimenticios para repartirlos entre los más necesitados. “Eso se ha reducido casi a cero”.

Por la paz

Aparte de lo que llama la situación-país, a la hora de hacer su análisis, el padre Darío alude al mensaje de paz de la Iglesia Católica.

Considera significativas las palabras del papa Francisco, pronunciadas este 1 de enero al celebrarse el Día Mundial de la Oración por la Paz, donde el pontífice abogó por la no-violencia.

Desecha las críticas lanzadas contra la Iglesia católica cuando esta fija posición sobre algunos temas.

“Cada católico debe procurar el bien común, independientemente del rol que ocupe en sociedad”, agrega el sacerdote, mientras apura el paso para tomar vía hacia la Curia Diocesana en La Asunción, donde le esperan asuntos eclesiásticos.




Contenido relacionado












Locales | Sucesos | Afición Deportiva | Nacionales | Internacionales | Vida de Hoy | Gente Feliz | 50° Aniversario | Opinión


Nosotros | HISTORIA | MISIÓN, VISIÓN Y VALORES