2 Sep, 2016 | El Magisterio venezolano es aguerrido y luchador social por
naturaleza. Tal vez algún docente afecto al gobierno no esté de acuerdo con mi posición, sobre todo porque me tomo la libertad de hablar en nombre del Magisterio. Respeto su opinión en este momento, pero le sugiero que se ponga la mano en el corazón, y vea objetivamente varias cosas:

1) Siendo hoy profesional universitario de la docencia, compara tu situación sociolaboral actual con la de hace, al menos, 5 años; 2) ¿Estás conforme con el salario que devengas
y con las condiciones de trabajo en tu institución? 3) ¿Tienen realmente tus alumnos la atención educativa y de otras necesidades que pregona el gobierno?
4) ¿Crees realmente que la Educación está dando los frutos que tiene que dar dentro de la sociedad, o simplemente es usada con fines politiqueros que no responden
a los reales intereses de los niños, sino a la pretensión del régimen de permanecer en el poder; 5) Mira a tu alrededor, ¿tienen tú y tu familia, sobre todo tus hijos, garantizados los servicios mínimos de alimentación, salud, vestido y recreación? 6) ¿Realmente sientes que con este régimen ha mejorado tu calidad de vida y la de tu familia? 7) ¿Sientes que de verdad tus hijos tienen garantizado su futuro aquí, o los ves abordando un avión para irse a buscar oportunidades en otro país? 8) Mira tu entorno y ve a tus paisanos, no sólo a tus vecinos, sino las personas de todos los pueblos neoespartanos, ¿ves alegría y felicidad en ellos, o ves la angustia y la tristeza de no tener cómo atender la salud y la alimentación de sus seres queridos? 9) ¿Conoces a alguien que no haya sufrido un atraco o robo, o no le hayan matado un familiar o amigo? 10) ¿De verdad piensas que nos merecemos este gobierno incapaz, negligente, corrupto, mentiroso
y hambreador?

Colegas, levantemos la enseña de lucha que el 15 de enero de 1932 levantó el Maestro Prieto en contra de la dictadura gomecista. ¡Revocatorio y elecciones regionales YA!