Especialista empleando la terapia / Foto: JHONNATAN BENITEZ

24 Ago, 2016 | Durante los años recientes, la evolución tecnológica ha permitido desarrollar una rama de la medicina enfocada en el antienvejecimiento del ser humano mediante procedimientos innovadores que, al mismo tiempo, favorecen su bienestar.

Para Belinda Romero, médica especialista en terapia regenerativa y antiedad de Nueva Esparta, la acupuntura facial es la última tendencia que recomienda para los adultos mayores en la Isla. Dicho tratamiento consiste en colocar agujas muy finas en la cara con la finalidad de activar la producción de colágeno, fibrina y elastina, proteínas responsables de la elasticidad y suavidad de la piel.

“Lo mejor de este método es que, a diferencia de otros, no tiene efectos adversos y los resultados son inmediatos”, explicó Romero. Adicionalmente, sirve para tratar el dolor, eliminar la cefalea, la alergia e incluso para tratar desórdenes mentales y deficiencias respiratorias.

Pese a que la acupuntura facial es generalmente sugerida a personas de la tercera edad, es común que los adultos contemporáneos también la practiquen.

Opciones

Sin embargo, esta no es la única alternativa. Para quienes temen a los pinchazos, existen otras técnicas medicinales que ayudan a rejuvenecer los órganos, afirma la experta. Los sueros de vitaminas, el plasma rico en plaquetas, la terapia de células madre y de ventosas son algunas de ellas.

Sin embargo, lo más importante es que, en primer lugar, el paciente debe acudir a una consulta médica pues, según Romero, “todos los individuos tienen necesidades y problemas diferentes que deben ser estudiados para su correcto diagnóstico y, posteriormente, aplicar la técnica más adecuada”.

Asimismo, debe entenderse que estos procedimientos no son para regresar a la juventud, sino para detener el deterioro del organismo humano.

Historia

Originalmente, la acupuntura proviene de la medicina china tradicional y se fundamenta en la filosofía del ying y el yang; lo que significa que este método busca equilibrar las energías interiores de la gente. Efectivamente, la OMS autoriza su empleo.