El templo de Santa Ana fue delicadamente decorado para esta fiesta eucarística. / Foto: GÉNESIS VELÁSQUEZ

27 Jul, 2016 | La celebración eucarística por Santa Ana y San Joaquín dio cabida para que el obispo de la Diócesis de Margarita, monseñor Fernando Castro Aguayo, reflexionara sobre la importancia de los abuelos y de la institución de la familia.

El templo de Santa Ana del Norte, municipio Gómez, albergó la mañana de ayer a cientos de feligreses que acudieron a profesar su fe.

En la celebración también participaron las autoridades regionales y locales, como el gobernador Carlos Mata Figueroa y la alcaldesa Yannelys Patiño, entre otros.

Monseñor Castro Aguayo fue enfático en decir que para conocer y amar a Jesucristo hay que conocer a su familia y sobre todo la influencia que tuvieron en él sus abuelos Santa Ana y San Joaquín.

Precisó que primero está Dios a quien se debe amar con toda el alma y luego amar y proteger a la familia.

La celebración a Santa Ana sirvió como motivo al Obispo de Margarita, para fijar posición en cuanto a las uniones igualitarias, donde a su juicio y basados en los preceptos de la Iglesia, esto no se puede llamar familia.

En su explicación, la familia, desde tiempos inmemorables, es vista como la unión del hombre y la mujer. Por lo que resaltó la necesidad de que los feligreses defiendan la institución familiar.