Entre los frutos más solicitados por los clientes destacan el cambur y la mandarina. / Foto: JHONNATAN BENITEZ

9 Feb, 2016 | Vendedores de verduras y frutas de la avenida 31 de julio en el municipio Arismendi, señalaron que todas las semanas los proveedores llegan con precios diferentes y que es una de las razones por las que se ven en la necesidad de aumentar los precios de los productos.

Erasmo Navarro, comerciante, dice que trata de vender lo más económico posible, tratando de ajustarse a los precios del distribuidor. “Por lo general se hace un ajuste de 30 a 40% del precio”.

Sostuvo que el ajuste de los precios ha aumentado, pero la ganancia rinde menos para invertir “porque cuando uno va a comprar la mercancía ya no tiene el mismo precio”.
Refirió que el año pasado el cambur fue uno de los frutos que aumentó de precio seis veces y “este año ya se le han hecho tres ajustes”.

Mientras que Argenis Avendaño, también vendedor, manifestó que a diario va al mercado de Conejeros a buscar los productos “pero nunca encuentro la misma cantidad, variedad y precios”.

Señaló que la semana pasada un saco de papa de 55 kilos, marcaba un valor de Bs 21.000 en Conejeros y “esta semana ya me lo comenzaron a vender en Bs 27.000”, lo que significa que de 400 bolívares ahora deberá ofrecer el rubro a los clientes en 600 bolívares.

En el caso del kilo de verdura surtida, Avendaño explicó que actualmente se está comercializando a un costo de 400 bolívares “sin ocumo blanco, porque el saco me lo están poniendo muy costoso”.

Además se conoció que productos como el tomate y ají margariteños están siendo poco distribuidos en los comercios de la región insular.

Distribución

Comerciantes señalaron que en los actuales momentos son pocos los productores de la región insular que les están surtiendo productos, Explicaron que a veces pueden pasar hasta más de cuatro meses sin que los visite algún agricultor de la isla.

Consideran que los pocos que están cultivando, lo hacen a pequeña escala y que por esa razón no cubre la demanda de la población neoespartana.

Comentan que no tienen otra opción que continuar adquiriendo las verduras, frutas y hortalizas en el mercado municipal de Conejeros hasta que en determinado momento se normalice la situación.

Confesaron que se han visto en la obligación de ayudarse con la venta de chucherías.