Son muchos los niños que asisten al cine o a un centro comercial durante sus vacaciones para distraerse. / Foto: STEPHANY OLDAN

28 Jul, 2015 | Luego de nueve meses de actividades escolares, los niños y adolescentes del estado Nueva Esparta toman un respiro y salen de vacaciones. Este tiempo es uno de los que más mortifica a sus padres, pues deben decidir lo que harán sus hijos con todo este tiempo libre.

Hay muchos que inscriben a sus chamos en planes vacacionales plagados de actividades de todo tipo que ocupan prácticamente a los muchachos casi todo el día. Mientras que otros prefieren inscribirlo en un curso intensivo de inglés, matemática, física, química o prepararlos en la asignatura donde durante el año escolar su hijo tuvo mayores dificultades.
Sin embargo, ¿qué desean hacer los niños durante las vacaciones? Muchas veces el interés de los padres se sobrepone a los gustos de los muchachos y los conducen a hacer actividades en las que no desean estar incluidos.
La orientadora Claudia Aragón señaló que los padres, si bien no deben imponer actividades a los niños y adolescentes, tampoco pueden permitir que se queden acostados frente a la televisión todo el día o jugando pasivamente en Internet.
“Al no permitir esta pasividad, los padres le hacen un gran favor a sus hijos, quienes buscarán otras maneras de pasar el tiempo”.
Eduardo Pérez, habitante de Porlamar, señaló que no piensa tocar un libro a menos que sea una historieta o alguno de Harry Potter.
“Quiero pasar tiempo en la playa, jugando con mis amigos, ir al cine o pasear por La Sierra con mi familia. Estoy muy contento de haber culminado mis clases y espero descansar mucho”.
Asimismo, indicó Aragón que no hay que estructurar todo lo que hacen los hijos; el tiempo libre y no estructurado es igual de importante para un buen desarrollo. “Dejar volar la imaginación y ‘echar carro’ también hace falta, obviamente, bajo la supervisión de adultos”.
La orientadora advirtió que con los niños muy pequeños y los bebés a bordo por primera vez, las vacaciones pueden ser difíciles.
“El cambio de rutina y de lugar puede afectar negativamente a los más pequeños”.
Vivian Andrade, residente de Porlamar, manifestó que durante sus vacaciones sólo desea descansar todo el día y olvidarse de los libros.
“Quiero pasar todo el día durmiendo y jugando con mi hermana. Espero salir a pasear con mis padres, pero no tenemos nada planeado aún”.
Muchos de los niños encuestados señalaron que no les gusta que les impongan actividades durante este tiempo y al contrario desean descansar.

Tareas

La orientadora Claudia Aragón recomendó a los padres que se quedan
en casa, realizar una agenda para las vacaciones, con los días para ir a la playa o piscina, al cine, a pintar, manualidades, jardinería, cocinar o ir a visitar a algún amigo o familiar.
También recomendó reservar los fines de semana para un paseo fuera de casa, para un picnic en el campo, un paseo en bicicleta, ver o jugar a un
partido de fútbol, un encuentro con otras familias, etc. Dividir las tareas durante la semana: por la mañana deberes escolares (si los tiene), y por
la tarde, actividades caseras. Si los niños están de vacaciones y sus padres
también lo están las tareas del hogar deben ser compartidas entre todos.