5 May, 2015 | La música, la poesía, el verso, transitan por los caminos del alma, regocijan el espíritu y alegran la vida; así lo hace Serenata Guayanesa. Con su trabajo incomparable, merece el aplauso eterno y la gratitud del pueblo por tanto amor demostrado en más de cuarenta y cuatro años de existencia.

"A la una la luna", hermoso libro que acaba de publicar el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, recoge canciones emblemáticas de Serenata Guayanesa adaptadas para voces infantiles; además, de obsequiarnos sus voces en un CD de colección. Canciones que acercan a cantores con su pueblo; voces que se mimetizan en el colectivo para fusionar la pureza de la música y la ternura de la poesía. Encuentro del poema con la niñez, papagayo que surca el cielo de la patria y que remonta las nubes asiéndose a la independencia legada por nuestros libertadores.

Iván Pérez Rossi, maestro del verso, poeta de estirpe guayanesa, junto a sus hermanos de sangre y vida César Pérez Rossi, Mauricio Castro Rodríguez y Miguel Ángel Bosch, conforman una agrupación que lucha y defiende la identidad cultural de los venezolanos. Merecidos los reconocimientos que ostentan, entre ellos Patrimonio Cultura de Venezuela y la Orden Pedro Rincón Gutiérrez concedida el pasado lunes 27 en el Teatro César Rengifo por parte de la Universidad de Los Andes.

Cuando escuchamos a Serenata Guayanesa nos identificamos con las raíces musicales del país, nos imbuimos en el trabajo amoroso de músicos, poetas y compositores nacionales cuya existencia han dedicado a la creación de obras para el disfrute de los venezolanos y especialmente los niños y niñas.

Serenata Guayanesa es y será siempre un corazón para cantar, cobijo de la memoria colectiva donde se ampara la belleza del país; alborada y crepúsculo para que los niños jueguen metras mientras Jesús Rosas Marcano los guía desde el firmamento o Beatriz Mendoza Sagarzazu suelta su barquito de papel en los pozos azules o en los pequeños ríos de miel mientras Iván, César, Mauricio y Miguel interpretan nuestra canción infinita.