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¿Dolarización en Venezuela?
La respuesta a la pregunta variaría en el tiempo; de hecho, en el presente, estoy seguro que la gente respondería en dólares; pero, entre 1925 y 1974, apuesto a que la respuesta sería en bolívares...
Manuel Acevedo Ramírez | manuelacevedoramirez@gmail.com

19 Abr, 2015 | Somos del criterio de que para garantizar la estabilidad económica del país no es indispensable dolarizar la moneda, ya que esta conversión monetaria pudiera resultar innecesaria e insuficiente y que, por el contrario, este tipo de cambio del signo monetario pudiera incidir en el poder de compra de cara a la realidad salarial venezolana.

Nuestro patria Venezuela, fue por más de 50 años (entre 1925 y 1974) una de las economías en crecimiento más estables del planeta, a pesar de no estar dolarizada. Hoy por hoy, existen centenares de economías estables con moneda propia, lo que desvirtúa la tesis de la dolarización y evidencia que no es suficiente que una economía esté dolarizada o eurozada para estar exenta de inestabilidad, como el caso de Grecia, que abandonó su moneda nacional y a pesar de ello sufre la pérdidas de competitividad por sobrevaluaciones reales, ocasionadas cuando la inflación o alza del ratio salario-productividad es mayor internamente que en el extranjero.

La dolarización, eurozación, o substitución monetaria completa de una economía implica sacar de circulación la moneda nacional y, por tanto, abandonar o renunciar a una institución fundamental del país (la moneda y política monetaria nacional) para importar otra del resto del mundo, que se supone superior, como por ejemplo el dólar o el euro, y con ello, por ende, la política monetaria de la Reserva Federal de EUA o del Banco Central Europeo.

En palabras llanas, quien defiende la dolarización, implícita o explícitamente, prefiere el dólar y el euro, o la Reserva Federal de EUA y el Banco Central Europeo, al bolívar y el Banco Central de Venezuela. De allí que, en apoyo a su argumento, el defensor de la dolarización suela preguntar incorrectamente: ¿usted prefiere ganar en dólares o en bolívares? Digo incorrectamente, porque la respuesta a la pregunta variaría en el tiempo; de hecho, en el presente, estoy seguro que la gente respondería en dólares; pero, entre 1925 y 1974, apuesto a que la respuesta sería en bolívares; tan es así que, para aquella época ahorrar en dólares era impensable, y quien lo hizo perdió dinero respecto al que ahorró en bolívares.

Lo único cierto es que, quienes defienden la dolarización completa, no tienen muy claro el problema de la inestabilidad macroeconómica, que se presenta como un problema de la inestabilidad de los precios y del tipo de cambio real, o poder de compra de los salarios actuales.

Pensamos que quienes defienden la dolarización son los mismos que promueven este mecanismo para controlar la importación de instituciones extranjeras (el dólar o el euro; o, lo que es lo mismo, la confianza y restricciones que implica apegarse a la política monetaria de la Reserva Federal de EUA o el Banco Central Europeo), porque creen que es políticamente inviable la recuperación institucional; mientras que quienes, como yo, pensamos que sí es posible la recuperación de las instituciones nacionales y la confianza en las mismas, creemos que lo que corresponde es trabajar por levantarlas y recuperarlas, para garantizar la estabilidad macroeconómica y el bienestar de Venezuela.




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