La inutilización de las 43 armas se realizó bajo la mirada de cientos de personas en la plaza Bolívar de Porlamar. / Foto: VANESSA RANGEL

31 Ene, 2015 | El jefe de la Región Estratégica de Defensa Integral Marítima Insular (Redimain), Víctor Ortiz, participó en la inutilización de 32 armas de fuego que fueron retenidas en diversas acciones. Esta actividad se realizó en la plaza Bolívar de Porlamar la mañana de este viernes.

Ortiz indicó que con este tipo de acción se da cumplimiento a la Ley de Armas y Control de Municiones. De las 32 armas incautadas, 16 fueron recuperadas por la Policía del estado Nueva Esparta, 14 por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y dos por la Policía Municipal de la Península de Macanao; adicionalmente se sumaron 11 armas de entrega voluntaria.

"Las personas se han adherido a la entrega de armas voluntaria para hacer de Nueva Esparta una zona libre de violencia y llena de paz", dijo Ortiz.

Las armas incautadas durante la frustración de diferentes delitos pasaron por un proceso de experticia ordenado por la Fiscalía de la República. Ortiz indicó que el promedio de armas que destruyeron es superior al del año pasado para la misma fecha, que fue de 23 armas.

Adicionalmente, hay un lote de armas que se han incautado en diversos procedimientos que ha efectuado la Guardia Nacional Bolivariana, que no participó en esta actividad puesto que no han pasado el proceso de experticia solicitado por las leyes venezolanas.

Llamado

El jefe de la Redimain, Víctor Ortiz, aprovechó la concurrencia de personas en la plaza Bolívar de Porlamar para invitarlos a entregar sus armas.

"Las armas deben estar en poder de los cuerpos de seguridad, que son quienes se encargan de resguardar al pueblo. Nosotros con la Comisión de Paz estamos enfrascados en hacer de Nueva Esparta un territorio de paz".

Señaló que esta actividad se realizará mensualmente y en lugares públicos, para que el pueblo conozca la labor de los órganos de seguridad.

El jefe de la Redimain indicó que las armas inutilizadas serán enviadas a Sidor, en el estado Bolívar, para que utilicen este hierro para hacer las cabillas utilizadas para la construcción de viviendas.