23 Oct, 2014 | Cartagena.- Los grandes cambios que demanda la sociedad colombiana no están garantizados ni siquiera en el caso de firmar la paz entre el Gobierno y las FARC, lo que pone en evidencia los retos del posconflicto, advirtió este miércoles el director de la Fundación Paz y Reconciliación, León Valencia.

Valencia participó en el foro sobre gobernabilidad democrática que concluyó este miércoles en Cartagena de Indias y que ha sido organizado por la Agencia España de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), con motivo de su 25 aniversario.

"La paz, con los grandes cambios que se están demandando desde la sociedad, no está garantizada. No hay sujeto capaz en Colombia de gestionar una paz con grandes cambios", remarcó el también fundador de Arco Iris, una de las ONG que analiza con mayor profundidad el conflicto colombiano.

Valencia, quien fue guerrillero del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y dejó las armas en 1994, afirmó que Colombia afronta, además de una posibilidad de paz, "demandas de cambio y un viraje de la economía hacia las industrias extractivas".

Vaticinó que el "escenario más posible es una paz con cambios mínimos" y lo justificó en que el actual presidente y promotor del diálogo con la guerrilla, Juan Manuel Santos, un neoliberal desde el punto de vista económico y de centro derecha en lo político, "es el más reformista".

"El primer reto es aplicar los acuerdos de La Habana en los 242 municipios donde está el conflicto, que son el 25 % del total, el 40 % del territorio y acogen al 10 % de la población", subrayó, al insistir en que debe hacerse "de abajo hacia arriba" porque imponer el Estado desde arriba "siempre ha fracasado".

"El segundo es encontrar salida a las bandas criminales", alertó sobre los grupos armados nacidos a partir de la desmovilización en 2006 de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y que son causa de una buena parte de la violencia en Colombia.

Y "el tercer reto es atender a la seguridad urbana con un plan de paz ciudadano", matizó.

Para ejecutar las decisiones de Cuba, donde ya se han alcanzado tres preacuerdos sobre tierras, participación política y cultivos ilícitos, Valencia propuso "una transformación de la fuerza pública", que en Colombia está integrada por más de 450.000 soldados y policías entrenados para la guerra.

En la misma mesa, el secretario nacional de la Comisión de Conciliación y miembro de la Comisión de Paz de la Iglesia Católica, el sacerdote Darío Echeverri, pidió el acompañamiento de la comunidad internacional al proceso.