19 Oct, 2014 | En fecha reciente, por decreto presidencial, fueron fusionados en una sola cartera, los ministerios del Ambiente y el de la Vivienda, con el nombre de Ministerio del Ambiente y del Hábitat.

Aunque reconocemos que el antiguo Ministerio del Ambiente "tenía muchísimas fallas en su institución y que era necesario que se reestructurase, hacerle una reingeniería y revisarle algunas cosas" diferimos de su nuevo destino, máxime si tomamos como premisa, las palabras del propio presidente Maduro, durante su intervención en la Cumbre sobre el Clima, celebrada en la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, donde expresó: que "Esta batalla (contra el cambio climático) la ganamos si los pueblos se movilizan y para ello estamos asumiendo compromisos orientados hacia esos objetivos", lo cual evidencia su vocación ambientalista y su innata preocupación por el medioambiente.

Es necesario, asimismo, recordar que el extinguido Despacho del Ambiente se diseñó sobre la base de los principales elementos que tienen que ver con el Hábitat, cuencas, ordenamiento territorial, polución del aire, desechos sólidos, suelos, aguas, educación ambiental, viveros forestales y ornamentales, así como las grandes obras de infraestructura de represas, etc.

Asimismo, le fue anexado Inparques que maneja todos los Parques Nacionales y las Áreas Bajo Régimen Especial y la responsabilidad de los Acueductos estadales a través de Hidroven, que coordina nacionalmente las hidrológicas regionales, para garantizar el derecho al acceso de un servicio de agua en condiciones óptimas de cantidad, calidad y continuidad, necesarias para garantizar la salud y desarrollo de la población.

El Ministerio del Ambiente fue, también, el catalizador para que Venezuela contara por primera vez con una Ley del Ambiente, además fue el responsable de crear el Plan Nacional de Ordenamiento Territorial, extendido a planes estadales y municipales, el Plan Nacional de Cuencas, el Plan de los Sistemas Ambientales del país y el Plan Nacional de Educación Ambiental y tenía, además, entre sus funciones el deber y la obligación directa de manejar un porcentaje enorme del territorio nacional resguardados como Áreas Bajo Régimen de Administración Especial (Abrae).

Como Magister en ambiente y ambientalista de corazón, deseo solicitarle, poniéndome a su disposición, muy respetuosamente al señor Presidente Nicolás Maduro, la Refundación del Ministerio Bolivariano del Ambiente, devolviéndole su autonomía funcional administrativa, para que podamos dejarle a nuestros hijos, nietos y bisnietos, la mejor herencia, la de interactuar y convivir en armonía con nuestro ecosistema, partiendo desde el punto de que la protección de los recursos naturales es una responsabilidad compartida y su legado un desafío que se debe asumir frente a las condiciones actuales de crecimiento y de cambios en la región, que imponen la obligación de revaluar su accionar frente a las políticas que empleadas, revaluar la implementación de las instituciones ambientales existentes y de definir una agenda ambiental mucho más pragmática, que especifique el escenario geopolítico en el que se desenvolverán las políticas e instituciones involucradas con las dinámicas medioambientales.