Faro de la Puntilla tiene 17 metros de alto. / Foto: ARCHIVO

21 Ene, 2014 | Conocer a fondo una ciudad es un recuerdo invaluable. Si de Porlamar se trata su faro fue por años una parada obligada para las personas que la visitaban.

El Faro de la Puntilla, con sus 17 metros de alto, fue desde el 1º de enero de 1896 la guía de los pescadores de la ciudad marinera. Se encuentra en al comienzo del paseo Guaraguao, rodeado por una fuente y un anfiteatro que en años recientes ha servido de escenario para actos de la alcaldía local.

La recomendación es visitar esta "linterna gigante" en horas del día; por medidas de seguridad y para que capture las mejores gráficas con la luz del sol. Luego de levantar la vista hacia la cumbre del farol, no olvide darle la espalda y contemplar el mar que lo cobija.

El faro fue construido por la Sociedad Progreso y luego donado al municipio. Funcionó con normalidad hasta una noche tormentosa de 1940, cuando un rayo cayó sobre la lámpara del mismo, cuenta el cronista de Mariño, Erwin Murguey. El 26 marzo de 1998, día de Porlamar, nuevamente se iluminó tras colocársele una célula solar.

El tiempo de destello del Faro de La Puntilla era de seis segundos –cada guía de navegación tiene un tiempo estipulado para señalar al marino el lugar de donde proviene la luz, contando siembre desde que la luz se apaga.

Actualmente está prohibido ingresar al interior del faro, que el 15 de agosto de 1998 fue declarado monumento histórico municipal.